Plantas carnívoras: no hay nada que temer

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Sabréis si una planta es carnívora si atrae, atrapa y digiere una presa, normalmente insectos que caen en sus redes atraídos por su olor y colores.

¿Por qué una planta carnívora?

Tener una planta carnívora puede ser muy beneficioso para vosotros por varias razones. Es una planta muy resistente que necesita, como en el caso del cactus, pocos cuidados. El hecho de que se alimente de otros seres vivos facilita el que no tengáis que añadirle vosotros otros tipos de productos.

Cuidados de las carnívoras de interior

Pese a que son unas plantas muy fáciles de cuidar, vamos a ver ciertos aspectos importantes a tener en cuenta en su cuidado.

Lo primero es colocar a la planta carnívora en un sitio donde tenga un buen clima. Al principio del crecimiento, la planta es muy delicada, por ello deberéis ponerla en una maceta y taparla con un plástico para que sirva a modo de invernadero. Dejadla así al menos un mes y después sacadla. Ya estará lista para vivir sola al aire libre aunque son plantas que no soportan temperaturas extremas.

Estas plantas necesitan una temperatura media. Eso sí, durante el invierno necesitan hibernar.

Con respecto a la arena con la que plantar la carnívora, usad una tierra que sea más bien pobre. Eso sí añadidle arena especial para plantas carnívoras que se llama esfagno y otro poco de perlita. Por último, añadid arena gruesa.

Es una planta que necesita mucha humedad y mucha luz, por lo que conviene que dejéis agua destilada o agua de lluvia bajo el plato frecuentemente. En verano pulverizadla con agua (la cantidad dependerá de la especie de la carnívora). Con respecto a las horas de luz, tened cuidado de no tener la carnívora expuesta a la luz directamente.

También tendréis que tener en cuenta la alimentación con seres vivos. Si es una planta interior, tendréis normalmente que alimentarla vosotros y si la plantáis en el jardín, cuidad siempre de que haya capturado algún que otro animal.

Para terminar, tendréis que tener cuidado con las plagas. Estas plantas también pueden sufrir el ataque de parásitos como áfidos o cochinillas. Para evitar que las ataquen, tened primero cuidado con la humedad y eliminad lo antes posible las hojas muertas. Si aún así la planta se ha contagiado, eliminadlos usando alcohol isopropílico, es el mejor insecticida para este tipo de plantas.