Si tienes un poco de maña, el aluminio puede ser tu gran aliado para hacer verdaderas obras de arte en el bricolaje de casa. Estas son solo algunas ideas, pero ya sabes, deja volar tu imaginación.
Qué hacer con el aluminio
Con el aluminio puedes hacer por ejemplo marcos para cuadros. Solo tienes que cortar con la sierra unos perfiles del ancho que quieras y unirlos mediante soldadura realizando la forma deseada. Con esta simple tarea tendrás un marco para tus cuadros muy original. También puedes pintarlo del color que más te guste, ya que el aluminio lo permite.
Si te apetece hacer algo más elaborado, puedes crear una mesa de jardín. Toma bien las medidas y corta unos listones de aluminio para hacer las patas. Haz también un tablero rectangular a modo de base. No te olvides de lijar los cortes para que no se quede ninguna viruta que pueda suponer un peligro. Posteriormente, en cada esquina suelda las patas y ya tendrás la mesa terminada. Solo hay que poner encima un tablero de madera y sujetarlo con unos tornillos.
Otra idea es la de hacer una barandilla para las escaleras con listones de aluminio de diferente grosor. Un tamaño para la barandilla en sí y otro grosor para las pequeñas columnas verticales que unen la barandilla a las escaleras. Como ves, este es un bricolaje sencillo aunque no lo parezca, pues solo se trata de cortar listones del mismo tamaño y unir todo con soldaduras o tornillos. Asegúrate de que el aluminio esté bien sujeto al suelo.
Repujado
Esta técnica es la que se lleva a cabo para elaborar objetos artesanales a partir de láminas de aluminio. Su trabajo es algo más complicado, ya que requiere de cierta habilidad y tiempo. El objetivo es conseguir en una lámina de aluminio, un dibujo ornamental en relieve.
Para realizar esta tarea se necesitan guantes de látex, patinas o buriles, punzones y demás herramientas que permitan dar forma al aluminio. Para ello se trabaja sobre una superficie blanda para ir hundiendo el material y crear una figura en relieve por el otro lado.