Cada vez estamos más concienciados de la importancia de reciclar para darle una nueva vida a aquellos productos antiguos que han caído en desuso. Bombillas, palés, botellas… son infinitas las propuestas. Hoy te hablamos de las posibilidades que ofrecen las bobinas de cable. Con un poco de paciencia e imaginación puedes llegar a conseguir hermosos muebles.
Las bobinas de madera, muy utilizadas para enrollar y guardar una gran cantidad de cables, ofrecen grandes posibilidades tanto de reciclaje como de almacenamiento. Al igual que sucede con los palés, las bobinas son muy utilizadas para realizar muebles de hogar como, por ejemplo, una mesa para el jardín. Las opciones son múltiples, veamos algunas.
Antes de ponerte manos a la obra, es importante que compruebes el estado de la bobina, es importante que no presente grietas ni zonas que se puedan romper con facilidad. Una vez tengas el rollo listo, es momento de lijarlo al completo para conseguir una superficie lisa, libre de astillas. Para esto, utiliza guantes gruesos que eviten que te dañes las manos.
El siguiente paso es pintarla y decorarla a tu gusto, puedes optar por el color de la madera natural o bien realizar motivos decorativos… en este paso, los límites a la imaginación los pones tú. En todos los casos, si finalmente te decides a pintarla, no olvides utilizar una pintura impermeable para que no tengas que guardar el mueble cada vez que llueva. Para terminar, una capa de brillo y listo.
Otra de las opciones es hacer la misma mesa, pero con las patas de metal. Esto es muy útil si uno de los lados de la bobina está roto o en mal estado. Para ello sólo tendrás que encajar unas tuberías antiguas pero que sean resistentes y no estén dañadas.
Otros muebles originales
Además de una mesa para el jardín, puedes crear una mesilla de noche o una estantería circular para almacenar libros; sin duda será un mueble único e inigualable.
Para realizar esta original estantería también tendrás que lijar la madera que cubre toda la bobina con el fin de eliminar las astillas. Acto seguido, mide las distancias desde el exterior de la circunferencia al interior y de arriba abajo. Adquiere tablillas para colocar como separadores, colócalas en ambos lados y clávalas con un clavo para unirlas por ambos lados. Para terminar, dale una mano de pintura y un barniz, y todo listo para lucir estanterías nuevas.
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LO QUE DEBES SABER… |
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