Pasos para cambiar un portero automático
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Ya sea por el uso, por el paso del tiempo o porque se ha estropeado, antes o después llegará el momento de cambiar el portero automático o telefonillo.
Es una tarea relativamente sencilla que puede realizar, sin problemas, cualquiera que tenga un mínimo de habilidad para trabajos de bricolaje. Lo más complicado, que es la instalación, ya está hecho, por lo que lo único que hay que hacer es comprar un telefonillo como el que está instalado y ponerlo en lugar del viejo.
Requiere de poco tiempo y de pocas herramientas. En cambio, el ahorro que se consigue no es despreciable y, por otro lado, hacer las cosas uno mismo, resulta altamente gratificante.
¿Qué telefonillo elegir?
Para saber qué telefonillo elegir, hay que asegurarse de que el sistema de portero de nuestra vivienda es analógico. Para ello, comprobaremos cuántos hilos están conectados al teléfono viejo:
- Si son 2 o 3 hilos, el sistema es digital y, en este caso, para sustituir el telefonillo es necesario adquirir otro de la misma marca.
- Si tiene 5 o 6 hilos, el sistema es analógico, en cuyo caso se puede sustituir por otro universal analógico de cualquier marca.
Todos los porteros analógicos son compatibles, pero para facilitar la instalación es conveniente comprobar que aparece la marca de nuestro viejo portero en la tabla de equivalencias. En cualquier caso, en la tienda nos dirán qué modelo es el que se puede instalar.
Herramientas y materiales
Realizadas todas estas comprobaciones y una vez adquirido el nuevo portero automático, nos ponemos manos a la obra. Necesitaremos pocas herramientas:
- Taladradora.
- Brocas.
- Tacos de plástico.
- Tornillos.
- Destornilladores de estrella y plano.
- Lápiz y papel.
Cómo cambiar el portero automático, paso a paso
Estos son los pasos que hay que seguir para cambiar el portero automático:
- Desmontar la carcasa del viejo telefonillo.
- En la base que queda a la vista, se observarán varios cables de diferentes colores conectados a una regleta con números o dibujos. Es preciso saber en qué número está conectado cada cable. Para recordarlo posteriormente, hacer una foto o un croquis de las conexiones con el color de cada cable asociado al número de la regleta.
- A continuación, con un destornillador plano, comenzar a desconectar todos los cables. Para evitar cortocircuitos durante el trabajo y que el amplificador del portero automático o los altavoces sufran daño, es conveniente encintar individualmente las puntas de los cables según se van desconectando.
- Retirar la base vieja quitando los tornillos que la mantienen fijada a la pared.
- Presentar la base nueva. Si los agujeros para los tornillos no coinciden con los tacos que están puestos, macar los puntos para los nuevos tacos. Hacer los taladros en los puntos marcados. Posteriormente, introducir los tacos en los agujeros realizados.
- Meter los cables encintados por el hueco de la base del telefonillo nuevo, colocar la base en la pared y fijarla con sus correspondientes tornillos.
- Conexionar los cables en los bornes que correspondan según la foto o el croquis que se hizo. Por si acaso, es conveniente fijarse en el esquema que posiblemente lleva el nuevo telefonillo. Es probable que la nueva base tenga más opciones que la base antigua que se ha quitado. El hilo de la llamada puede tener dos alternativas: melodía o zumbido. Introducir el cable en la opción deseada.
- Ajustar el volumen tanto del micrófono como del altavoz girado el potenciómetro.
- Conectar el cordón entre la base del teléfono y el auricular. Probar que la intercomunicación entre el telefonillo y la placa exterior del portero funcionan bien. Comprobar, asimismo, el buen funcionamiento de la cerradura electrónica.
- Si todo funciona correctamente, poner la carcasa y trabajo terminado.
Como ves, cambiar el telefonillo del portero automático es una tarea sencilla que podemos hacer nosotros mismos.
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Qué artículo más útil. Hace pocos años se nos estropeó el telefonillo y llamamos a un profesional para que nos lo cambiase. Pero leyendo el texto podría haberlo cambiado yo, para la próxima ya sé lo que tengo que hacer. Gracias por la información.