Aprender a instalar una llave de agua en el jardín es sumamente práctico para disponer de un grifo en este espacio donde probablemente será de gran utilidad. Además de recoger agua para realizar multitud de tareas, en este elemento se puede conectar una manguera para regar las plantas con total comodidad o limpiar la superficie.
Requisitos para instalar un grifo en el jardín
- En primer lugar, es necesario localizar la ubicación adecuada para instalar el grifo en el jardín. A este punto debe llegar el suficiente caudal con la presión óptima para que el agua transcurra de forma correcta.
- Para evitar que la instalación se congele, entre el suelo y el grifo tiene que existir una distancia de al menos 50 centímetros. Si se trata de zonas donde las heladas son habituales, no hay que olvidar drenar la tubería durante el invierno. Además, para reducir el riesgo de congelación, es recomendable que la nueva tubería sea corta y que el grifo esté situado a una altura superior al punto de conexión del conducto.
- En el supuesto de que las tuberías tengan diferente diámetro, es aconsejable utilizar conectores de comprensión para unirlas en lugar de soldarlas.
- En este trabajo se recomienda utilizar tubos de polietileno. Este material es muy resistente, tanto a los agentes químicos como térmicos, así como a la presión del agua. Asimismo, no supone ningún peligro en la distribución de agua potable.
- Antes de comenzar con los trabajos de instalación de una llave de agua en el jardín hay que cerrar la válvula de paso principal y abrir todos los gritos para que las tuberías se vacíen por completo.
Herramientas necesarias para instalar una llave de agua en el jardín
- Taladro, brocas y tacos.
- Nivel de burbuja.
- Tijeras de bricolaje o sierra manual.
- Llave para apretar y aflojar.
- Tubos de polietileno.
Pasos para instalar una llave de agua en el jardín
- Medir la altura de la pared donde irá colocada la llave de agua.
- Taladrar los puntos que sean necesarios para fijar la placa del grifo e introducir unos tacos apropiados.
- Excavar en el suelo justo debajo de donde discurre la tubería del jardín.
- Elegir tubos de polietileno de 20 milímetros y cortarlos para realizar el ensamblado.
- Instalar una T de compresión en el tramo de la tubería general. Este componente incorpora una junta tórica y un anillo dentado para aportar estanqueidad y evitar que el tubo se suelte por la presión del agua.
- Apretar todas las conexiones con firmeza utilizando una llave inglesa para cerrar el anillo dentado sobre la tubería.
- Realizar todas las conexiones de los tubos con el grifo y enroscar la placa del mismo a la pared.
- Es conveniente enrollar teflón en la rosca macho del grifo para fijarlo mejor. No hay que olvidar que la cinta de este material solo se puede utilizar una vez, por lo que, si el grifo se afloja, es necesario retirar el trozo antiguo y colocar uno nuevo.
- Abrir la llave de paso y comprobar que no existen fugas de agua.
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