Cómo hacer un columpio para el jardín

¿Dispones de un jardín u otro espacio para poder instalar un columpio en el que tus hijos o nietos pequeños puedan divertirse? Te enseñamos cómo hacer un columpio en unos sencillos pasos.

¿Qué materiales y herramientas necesitas?

El material que vamos a utilizar es madera tratada para exterior, porque resiste mejor las condiciones atmosféricas. Se puede encontrar en almacenes de madera, de construcción y de bricolaje.

Necesitaremos:

• 1 listón de 145 x 70 mm para la barra superior.
• 4 listones de 70 x 70 mm para patas y travesaños.
• 2 trozos de madera maciza para los asientos de 45x25x30 mm.
• 8 m de cadena.
• 16 eslabones de unión.
• 8 hembrillas con sus arandelas y tuercas para los asientos.
• 16 tornillos de carretero M10 con sus arandelas y tuercas.
• 2 escuadras reforzadas de acero galvanizado de 70x70x55x2,5 mm.
• 4 pletinas regulables de atornillar para postes.
• Cemento, arena y grava para el hormigón.

En cuanto a las herramientas, usaremos las siguientes:

• Sierra de calar o serrucho.
• Taladradora.
• Broca de pala y broca de madera.
• Llave de tubo o de codo.
• Escofina o formón.
• Nivel de burbuja.
• Metro.

Así será la estructura del columpio

El columpio se compone de dos armazones laterales en forma de compás o ‘A’ mayúscula, compuesta cada una de ellas por dos listones de sección 70×70 mm -que forman las patas del columpio- más dos travesaños de la misma sección.

Las patas y el suelo deben formar un triángulo equilátero de, aproximadamente, 2,40 m de lado.

En el vértice de las patas se inserta la barra superior de sección 145×70 mm, de la cual se cuelgan los columpios. El largo de esta barra debe ser de 2,40 metros.

Una vez montado el columpio, tendrá una altura aproximada de 2,10 metros.

Cómo hacer un columpio, paso a paso

Paso 1: montamos los armazones laterales

Practicamos un corte a 60º en un extremo de cada pata.

Juntamos dos patas por el corte efectuado y entre ellas colocamos un taco que tendrá la misma medida que la sección trasversal de la barra superior (70 mm), para que al montarla después en el hueco que queda, encaje perfectamente.

Paso 2: hacemos una caja para insertar un travesaño superior

Para insertar un travesaño (70 mm), marcamos una caja en sentido horizontal al suelo justo por debajo de la unión de las patas. Este travesaño, además de servir para unir las patas en la parte superior, servirá también para apoyar la barra de los columpios.

Realizamos la caja haciendo cortes sucesivos a la profundidad deseada (25 mm estaría bien) con una sierra de calar o un serrucho, vaciándola después con un formón o una escofina.

Paso3: insertamos el travesaño superior

Sin quitar el taco (paso 1), insertamos un travesaño en la caja que hemos hecho y cortamos lo que sobresalga de las patas. Acto seguido, hacemos una caja en cada extremo del travesaño de la misma profundidad que la anterior para que ambos rebajes encajen uno en otro.

Paso 4: taladramos el travesaño

Seguidamente, taladramos juntamente travesaño y pata con una broca del diámetro del tornillo que se va a insertar.

Previamente, por el lado que va la tuerca, habremos hecho un taladro con una broca de pala del diámetro de la arandela para que esta y la tuerca queden embutidas. Con una llave de tubo o de codo apretamos las tuercas.

Paso 5: ponemos otro travesaño a la mitad

Marcamos otra caja, aproximadamente, a mitad de la patas para poner otro travesaño. Hacemos la caja (paso 2), cortamos el sobrante del travesaño y cajeamos los extremos (paso 3) y ponemos los tornillos (paso 4).

En este punto, ya tenemos terminado uno de los armazones laterales. Repetimos el procedimiento para hacer el otro.

Paso 6: insertamos la barra superior

Una vez realizados los dos armazones laterales, los enfrentamos con los travesaños hacia dentro, y procedemos a insertar en el hueco entre las patas la barra superior, en la que, previamente, habremos realizado cuatro taladros (paso 4) para insertar los ganchos que soportan los columpios.

Paso 7: Taladramos la intersección de las patas con la barra superior

En cada intersección de las patas y la barra superior practicaremos dos taladros (paso 4) para los tornillos que las unirán.

Paso 8: atornillamos sendas escuadras

En el ángulo cóncavo que forman la barra y el travesaño superior de cada armazón lateral, atornillamos una escuadra reforzada de acero galvanizado para darle mayor consistencia a toda la estructura.

Paso 9: los asientos del columpio

Los asientos del columpio se taladran en sus cuatro esquinas para insertar las hembrillas a las que se unirán las cadenas. Cada hembrilla lleva un eslabón de unión y un trocito de cadena.

Los dos trozos de cadena de cada lado se unen con otro eslabón de unión y este, a su vez, une la cadena que cuelga del gancho superior al que también va unida por medio de otro eslabón de unión.

Si existe dificultad para conseguir los dos trozos de madera maciza para los asientos, se pueden sustituir por listones del mismo espesor que se unirán en los extremos, por debajo, con otros dos listones. También se puede utilizar como asiento un neumático viejo.

Paso 10: fijamos la estructura al suelo

Para evitar accidentes y dotar al columpio de mayor seguridad y solidez, es imprescindible fijarlo firmemente al suelo.

Para ello, haremos unos agujeros en el suelo de, aproximadamente, 30x30x40 cm, que rellenaremos de hormigón en el que alojaremos las pletinas regulables perfectamente alineadas y niveladas entre sí.

Cuando haya fraguado el hormigón, podremos atornillar las patas del columpio a las pletinas. Para facilitar un mejor asiento, puede ser necesario cortar un poco el extremo de las patas en sentido paralelo al suelo.

Consejo final

Es conveniente prever un piso blando (césped, arena…) debajo del columpio para amortiguar posibles caídas y aminorar daños. Asimismo, se debe revisar periódicamente la instalación para comprobar que todo se encuentra en buen estado de funcionamiento o sustituir aquello que se haya deteriorado.

Siguiendo todos estos consejos, tendremos un columpio sólido y duradero, a prueba de embates. Contra cualquier tipo de accidente o percance, recuerda que el Seguro de Hogar MAPFRE es la mejor garantía que puedes tener de tu parte.