Si alguna vez te has topado con una de las pinturas 3D que hay en el asfalto de algunas calles, seguro que te habrá causado una gran impresión. Según desde donde se miren, engañan a la vista y hacen creer que bajo los pies se abre un gran abismo o que un tiburón sale de los adoquines con las fauces abiertas dispuesto a engullir a algún viandante.
Estas increíbles composiciones visuales nacieron como una muestra de arte callejero. Kurt Wenner, Edgar Mueller, Julian Beever o John Pugh fueron algunos de los artistas más conocidos. Todos decoraron espacios urbanos con obras pictóricas que, desde una determinada perspectiva, parecían sobresalir de una pared o del pavimento.
Ahora, estas pinturas 3D dan el salto a los hogares. Cada vez es más habitual encontrar diseños interiores que abogan por esta tendencia para dar protagonismo a una de las paredes de una estancia. El resultado no puede ser más original, dinámico y lleno de vida. Si tú también quieres unirte a este estilo, toma nota de estos consejos.
Pinturas 3D, ¿Cómo elegir el mejor diseño?
La pintura 3D en las paredes permite conseguir una decoración interesante, moderna, y ayuda a ampliar visualmente el espacio.
Diseños
La forma más fiel de seguir esta tendencia es mediante murales 3D que reflejen paisajes realistas o fantásticos, como estos:
Si no te atreves con paisajes llenos de profundidad, imágenes místicas de fantasía o reproducciones realistas de cualquier tipo (para lo cual hay que ser un virtuoso del pincel), puedes optar por patrones geométricos tridimensionales, mucho más sencillos de hacer y menos osados que los anteriores.
Colores
En cuanto a los colores, las ilustraciones realistas aceptan todo tipo de tonalidades, pero las formas geométricas encajan mejor con colores neutros; con aquellos que combinen con el resto de la estancia; o con varios colores (nunca más de tres).
¿Qué pared pintar?
Para no recargar el ambiente, lo más adecuado es pintar una sola pared, aquella que queramos que se lleve todo el protagonismo. No es necesario añadir nada más: ni cuadros ni accesorios. El diseño que hayamos estampado será más que suficiente para llenar de vida la estancia.
Si quieres ir un paso más allá, puedes optar por pintar el suelo o el techo. Todo depende del grado de atrevimiento y originalidad de cada uno.
¿Cómo pintar una pared con efecto 3D?
Conseguir un efecto tridimensional en una superficie plana es tan sencillo como aplicar la perspectiva. Hemos dicho sencillo, pero lo cierto es que se trata de un trabajo arduo y minucioso.
Si estás experimentado en las artes pictóricas, puedes hacer tu dibujo 3D en una de las paredes como si de un lienzo de tratase. Pero si no es el caso, puedes optar por los patrones geométricos de los que hablábamos antes.
Existen muchas técnicas. Una de ellas, la más fácil, consiste en utilizar cinta de pintor para construir las formas en la pared y después pintar los espacios que quedan libres, como en este vídeo:
Otra técnica es usar plantillas a modo de esténcil y colorear los bordes con pintura en spray:
Si no te atreves a realizar este trabajo por tu cuenta, siempre puedes contratar a un experto para que lo haga. Antes de nada, infórmate sobre los trabajos anteriores de dicho artista para comprobar que realmente domina la técnica. Pero, además del estilo de tu vivienda, no olvides cuidar también todo lo que hay en ella. Para ello, el Seguro de Hogar MAPFRE te ofrece las coberturas más completas para solventar rápidamente muchos de los imprevistos que aparecen en el momento menos pensado.