Características
Ingredientes
- 1,5 litros gaseosa
- 1 litro zumo de uva
- 500 mililitros zumo de naranja
- 2 manzanas medianas
- 200 gramos azúcar
- 1 limón
- 2 naranjas
- Cubitos de hielo
Elaboración paso a paso
- Preparar una sangría sin alcohol es muy sencillo, tan solo basta con disponer de ingredientes de buena calidad y contar con un recipiente adecuado para elaborarla. Lo mejor es que te hagas con una jarra de gran tamaño para que quepa toda la cantidad en su interior y puedas mezclar fácilmente.
- Una vez elegido el recipiente, vamos a ver cómo se hace paso a paso. En primer lugar, añade el zumo de naranja. La mejor opción es que te decantes por exprimirlo tú mismo, así evitarás el aporte extra de azúcar que contienen los zumos ya preparados.
- Lo mismo ocurre con el de uva, si tienes una licuadora, es mejor que lo hagas en casa. En caso contrario, podrás comprarlo en el supermercado. Si decides hacerlo con jugos naturales, fíltralos bien para evitar impurezas.
- A continuación, añade el azúcar a la jarra y diluye bien. Si no te gusta demasiado el sabor dulce, puedes evitar este paso ya que las naranjas y las uvas contienen azúcar y es probable que no necesites más.
- También puedes optar por añadir otro tipo de edulcorantes como puede ser stevia o similares. Tras ello añade la gaseosa.
- ¿Qué sería de la sangría sin sus trozos de fruta? Para ello, lava bien la naranja y el limón y córtalos en gajos, procura que tengan la misma medida para que el resultado sea mejor. Incluir frutas naturales ayuda a mejorar el sabor de la bebida y aporta todos sus nutrientes.
- Repite la operación con las manzanas. Lávalas bajo el grifo y córtalas en gajos o dados, como más te guste. Debido a la textura de esta, al estar en contacto con la bebida irán empapándose de su sabor y será una agradable golosina cuando termines de beber tu sangría.
- Una vez que hemos preparado todas las frutas tan solo deberemos añadirlas a la jarra en la que tenemos el resto de los ingredientes. ¡Tu sangría ya está lista! Solo queda el toque final. Sino vas a tomarla inmediatamente, guárdala en el frigorífico para que esté fresca. En caso contrario añade cubitos de hielo al gusto para conseguir la temperatura adecuada.