Características
Ingredientes
- 1 kilo Tomates maduros
- 300 gramos remolacha
- 200 gramos Pan
- 250 mililítros AOVE
- 1 diente Ajo
- 1 pizca sal
- 1 chorro Vinagre
Elaboración
Elaboración paso a paso
- Se trata de un plato muy sencillo de realizar y, sobre todo, muy sano. Lo primero que debes hacer es conseguir productos frescos y de calidad para lograr el mejor resultado. Una vez que los tengas, lo primero será preparar la remolacha para poder realizar el plato utilizándola como base.
- Es importante limpiar bien la remolacha para eliminar cualquier rastro de tierra o suciedad. A continuación, colócala sobre una tabla y utiliza un cuchillo para cortar el tallo. Pero no cortes todo el tallo, conserva unos 10 centímetros para mantener todo el color de la remolacha durante el proceso de cocción, luego deberás retirarlo.
- Una vez cortada, coloca un poco de agua con sal en una cazuela lo suficientemente grande para albergar toda la cantidad de esta hortaliza que hemos cortado. Deja que comience a hervir y añade en ella toda la remolacha que has preparado previamente sin pelar. Deja que se cueza durante una hora aproximadamente. Para comprobar si está en su punto, pincha con un cuchillo un trozo hasta que compruebes que está tierno.
- Cuando la remolacha esté cocida, retírala del fuego y colócala en un escurridor para eliminar el exceso de agua. Ahora deberás dejarla enfriar para poder continuar con el proceso. Una vez fría podrás empezar a pelarla usando para ello un pelador o un cuchillo afilado. Después, córtala en trozos de tamaño medio y resérvala.
- Tras la realización de este proceso, deberás preparar los tomates. Lávalos para que no queden rastros de tierra y córtalos en trozos de tamaño medio. Ahora deberás integrar todos los ingredientes, para ello, usa el vaso de la batidora y añade la remolacha, el tomate, el ajo, el pan, la sal y el aceite de oliva. Deja la mezcla reposar durante unos minutos para que el pan se ablande.
- Tritura la mezcla elaborada hasta que se forme una crema. Cuando ya esté, añade un chorrito de aceite de oliva mientras bates a una velocidad baja. De esta forma, lograrás que quede mucho más cremoso. Para eliminar restos de impurezas y lograr una mejor textura utiliza un pasapurés. En el caso de que haya quedado espeso podrás aligerarlo con un poco de agua.
- Una vez preparado comprueba que el punto de sal es el correcto y añade un chorrito de vinagre al gusto. A continuación, deberás introducirlo en el frigorífico para que se enfríe antes de consumirlo. A la hora de servirlo, puedes trocear unos pistachos y añadirlos al plato para aportar un toque crujiente.