Pimientos rellenos de queso de cabra

Lo primero que tendremos que hacer es sacar los pimientos de la lata e ir cortando el queso en rodajitas de aproximadamente un dedo y medio de grosor, para después ir aplastándolas con un tenedor e ir rellenando los pimientos como si fueran cucuruchos.

En cuanto a las cantidades, lo habitual es una rodaja de queso de cabra por cucurucho, ya que de lo que se trata es de que estos queden bien rellenos y gorditos. Si vemos que el pimiento no queda del todo relleno, podremos añadirle un poco más.

Una vez hayamos terminado con este paso, que es el trámite más complicado de esta receta, colocaremos los pimientos en una fuente de cristal que podamos meter en el horno.

En un bol iremos mezclando el tomate frito y la nata para cocinar hasta que veamos una salsa rosa. A continuación la extenderemos por encima de los pimientos del piquillo que habíamos rellenado.

Añadiremos unas hierbas provenzales por encima (no es bueno hacerlo en exceso, ya que podríamos restarle sabor al plato haciendo que predomine el de las especias) y los meteremos en el horno, que habremos calentado previamente a 160 oC, durante unos 10 minutos.