Comienza la temporada de compra de artículos navideños, y con ella el eterno dilema: ¿Qué árbol de Navidad comprar? ¿Natural o artificial? Si ahora mismo te lo estás planteando, te contamos todos los pros y los contras de cada opción para que puedas elegir a conciencia.
Ventajas:
- Su principal ventaja es que, al no tratarse de seres vivos, tampoco son perecederos, por lo que pueden utilizarse año tras año, con el ahorro que ello supone.
- Existen modelos de diferentes colores, incluso los hay con las luces ya incorporadas, así que la decoración no tiene por qué ser tan abundante y costosa como en el caso de los árboles naturales.
- Al decantarte por la opción artificial, estás evitando que se arranque de su hábitat por el mero hecho de decorar una casa por Navidad, aunque también es cierto que en la actualidad, la inmensa mayoría procede de viveros.
Inconvenientes:
- En contra de lo que mucha gente piensa, los árboles artificiales no son la mejor opción para preservar el medio ambiente. En su composición, cuentan con resinas plásticas cuya materia prima es el petróleo, por lo que son altamente contaminantes.
- Si te fijas, la mayor parte de estos árboles proceden de China, donde las normativas de sanidad y medio ambiente brillan por su ausencia. En muchos casos se utiliza mercurio y otros metales contaminantes. Por este motivo, cuando dejes de usarlo nunca debes tirarlo a la basura, sino que debes llevarlo a un punto limpio.
- Que compremos un árbol artificial no significa que estemos frenando la tala de árboles indiscriminada. La inmensa mayoría de los abetos naturales proceden de viveros y, además, son más sostenibles.
Ventajas:
- Hoy en día, la comercialización de abetos naturales no supone la tala indiscriminada de los mismos por estas fechas, ya que casi en su totalidad proceden de viveros donde han sido cultivados para tal fin.
- Tener un árbol natural en casa comporta grandes beneficios, como el aroma fresco que desprende.
- Es un producto cien por cien biodegradable y no daña el medio ambiente. Eso sí, cuando acaben las fiestas no hay que tirarlo a la basura, ni mucho menos replantarlo en el bosque, ya que puede que la especie que tengas no sea autóctona de tu región, con lo que puedes ocasionar un problema ecológico de envergadura. Puedes llevarlo mejor a un punto limpio o informarte si tu ayuntamiento ofrece un servicio de recogida.
- Estos árboles ayudan a evitar el calentamiento global. Para llegar a la altura perfecta han tenido que pasar entre dos y tres años en un vivero, un periodo bastante extenso en el que han eliminado grandes cantidades de CO2 a la atmósfera.
- Para los amantes de las navidades más tradicionales, la natural es la versión más auténtica.
Inconvenientes:
- Al tratarse de un ser vivo, vamos a tener que cuidarlo y prestarle la atención necesaria durante las fiestas si no queremos que amarillee o se estropee antes de tiempo.
- El uso de luces decorativas puede hacer que se recaliente y termine secándose en diferentes zonas.
- Son más difíciles y delicados de transportar que los artificiales. En muchos de los casos estos últimos se pueden hasta plegar.
- Es conveniente saber la procedencia del mismo y asegurarse de que tiene las raíces necesarias para aguantar todas las navidades.
En definitiva, en cuestión de árboles de Navidad, aunque los artificiales son más duraderos y no necesitan cuidados, son más contaminantes y dañinos para la salud. Los naturales, en cambio, son cien por cien biodegradables y respetuosos con el medio ambiente. Además, desprenden un aroma único que con la primera opción sería impensable. En cualquier caso, es mejor tener el Seguro de Hogar MAPFRE por lo que pueda pasar con tanta entrada y salida de gente en esta época, además, cuenta con unas coberturas tan completas que lo querrás tener siempre contigo.