En la búsqueda de un descanso óptimo, la elección de tu cama juega un papel fundamental. Exploraremos los distintos tipos de camas, colchones, almohadas y somieres, proporcionando información detallada para que sepas cómo elegir tu cama ideal y puedas crear tu espacio de descanso ideal.
¿Qué tipo de cama es la más adecuada para ti?
El punto de partida para elegir tu cama ideal comienza con la estructura. Desde camas tradicionales hasta opciones más modernas con canapé, existe una amplia variedad de tipos de cama.
Tendremos que tener en cuenta que, si no disponemos de mucho espacio de almacenamiento en el hogar, la mejor decisión siempre pasa por elegir una cama con canapé, eso sí, este tipo de estructuras siempre son menos económicas que los tradicionales somieres.
Por el contrario, las camas más tradicionales levantadas con patas ofrecen una mayor ligereza visual y un precio más ajustado.
Deberás considerar tus preferencias estéticas y de espacio disponible a la hora de elegir la estructura que mejor se adapte a tus necesidades.
¿Qué tipo de colchón te conviene más?
La elección del colchón es esencial para garantizar un sueño reparador. Podríamos decir que, junto con la almohada, se trata del elemento más importante y que más condicionará nuestro descanso.
Existen diversos tipos de colchones, desde los tradicionales de muelles hasta los más innovadores de látex y viscoelásticos.
También existen colchones que retienen mejor el calor o aquellos que son más frescos para viviendas ubicadas en zonas de altas temperaturas.
Incluso podemos encontrar en el mercado colchones especiales para personas con problemas de espalda como hernias discales o desviaciones de columna.
Al seleccionar un colchón, ten en cuenta tu posición al dormir, la firmeza deseada y cualquier necesidad específica para optimizar tu descanso.
Tipos de almohadas y somieres. Refinando tu confort
Las almohadas y los somieres desempeñan un papel crucial en tu comodidad nocturna. Existen diversos tipos de almohadas en función del material con el que están fabricadas. Podemos encontrar almohadas de látex, de plumas o viscoelásticas, tendrás que elegir la que mejor se adapte a tu forma de dormir y a tu presupuesto.
Además, en cuanto a los somieres, es importante tener en cuenta que, cuanto más denso sea, mejor, es decir, cuanto menos se deforme, mejor aguantará el peso de nuestro colchón y de nuestro cuerpo. Podemos encontrar en el mercado desde las clásicas estructuras ligeras de acero y tablones de madera, hasta somieres reforzados o incluso totalmente planos.
¿Cómo elegir un colchón y almohada según tus necesidades?
La elección del colchón y la almohada debe adaptarse a la perfección a tus preferencias personales y necesidades específicas.
Formas de dormir
- De lado. Opta por colchones más suaves que permitan que los hombros y las caderas se hundan ligeramente. Además de almohadas más gruesas para que ofrezcan un soporte adicional.
- Boca arriba. Los colchones de firmeza media son ideales para mantener una alineación adecuada. Las almohadas de altura media brindan el suficiente apoyo para el cuello.
- Boca abajo. Necesitaremos colchones más firmes para ayudar a evitar que la espalda se arquee. En estos casos, necesitaremos almohadas más planas para evitar así las tensiones en el cuello.
Tipos de colchón
- Látex. Ofrece un soporte firme y es ideal para quienes prefieren un colchón más fresco.
- Viscoelástico. Se adaptan a la forma del cuerpo y alivia la presión, son perfectos para quienes buscan la comodidad personalizada.
Tipos de estructura de cama
- Con canapé. Ofrece espacio adicional de almacenamiento, ideal para habitaciones con espacio limitado.
- Sin canapé. Proporciona un diseño más amplio y minimalista, perfecto para habitaciones más amplias.
Consideraciones adicionales. Medidas y espacios
No olvides tener en cuenta las dimensiones de tu habitación a la hora de elegir tu cama ideal. Las camas deben permitir un fácil movimiento alrededor de la habitación y no deben sentirse abrumadoras en el espacio disponible. Mientras que, al mismo tiempo, deben ser lo suficientemente espaciosas para asegurar el descanso.
La mayoría de camas tienen un tamaño estandarizado con una longitud constante de 190 cm y 200 cm y unas anchuras que varían entre:
- 90 cm (cama individual)
- 105 cm (cama de plaza y media)
- 135 cm (cama de matrimonio pequeña)
- 150 cm (cama de matrimonio estándar)
- 180 cm (cama de matrimonio grande)
- 200 cm (king size)
Igualmente, en algunos casos, podemos encontrar camas especiales de una mayor longitud para personas altas o camas reforzadas para personas con cierto sobrepeso. Sin embargo, todas las que salgan de los catálogos estandarizados de las marcas, suelen suponer un importante incremento en su presupuesto.