Cómo decorar una mesa romántica
Avada
El equipo de redacción de MAPFRE lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras. No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
Una celebración de aniversario, una primera cita, un día de los enamorados, San Valentín…hay muchas ocasiones en las que el mejor plan posible es una cena romántica para despedir el día en grata compañía? Si eres de la misma opinión, ¡Atento! Os damos las claves para degustar exquisitos manjares en una mesa (para dos) muy romántica. Y es que, para que la velada sea perfecta, no hace falta gastarse más euros de la cuenta en los restaurantes más selectos de las grandes urbes. Somos más prácticos y cenamos en casa.
Elementos de decoración para una mesa romántica
En toda cena romántica que se precie, hasta el último detalle cuenta. La decoración de la mesa, el ambiente que la rodea, los alimentos que vamos a degustar, incluso el estilismo personal que hemos elegido para la ocasión, para seguir sorprendiendo a nuestra pareja. Toda la parafernalia cuenta.
Mantelería
Para la ocasión vamos a elegir una mesa redonda que solo acepta a dos comensales. Hay que tener muy en cuenta el mantel de la velada. Os recomendamos que os decantéis por uno blanco, color elegante por excelencia, para vestir en condiciones la mesa. No tengáis miedo al elegir el tejido de la mantelería, pero el lino nunca defrauda, siempre es elegante. Además, os presentamos una apuesta atrevida en la decoración de esta mesa con tintes tan románticos. ¿Por qué no decantarse por servilletas que busquen un estudiado contraste? Por ejemplo, en rojo vino.
Otra opción es que el mantel nos ayude a evocar un ambiente especial y concreto. En ocasiones en lo que prima es el aire de romance, los manteles con estampados exóticos funcionan y nos hacen pensar en viajes y aventuras juntos. Desde manteles con arabescos y colores intensos que nos lleven a oriente a frondosas junglas y animales que nos trasladen al trópico. Salirse de lo clásico y manido puede ser una buena manera de reavivar el fuego de la relación.
Cubiertos
Respecto a la cubertería, el mismo esquema. Si somos más convencionales, hay que lucir esa noche la mejor que tengamos en casa, de plata de primera ley. La ocasión lo merece, ¿no? Con la vajilla, hacemos lo mismo, y disponemos en la mesa la más elegante. El éxito está en la porcelana blanca que aporta clase, estilo y evita que desviemos la atención de nuestra pareja. Las copas de cristal de bohemia, obvio.
Si por el contrario queremos fantasía e innovación -siempre de acuerdo con lo que sirvamos de comida- siempre podemos sorprender a nuestra pareja con alguna cubertería distinta y atrevida. Por qué no servir ostras y poner unos cuchillos especiales para abrirlas. O tal vez comida oriental y unos hermosos palillos esculpidos. O algo africano, especiado, caliente y servido en cuencos de madera. La novedad siempre es excitante.
Flores
Las flores y las velas deben estar muy presentes en la mesa romántica. Lo más recomendable es colocar, en el centro, un siempre elegante centro de flores (con especies florales como gardenias, azucenas, orquídeas o violetas) que debe contar con una vela para la ocasión. De nuevo, adecúa la elección de las flores al tono y orientación de la cena. Aunque las flores vistosas y coloridas siempre crearán una atmosfera alegre y seductora.
Complementos decorativos
Si podemos, es muy recomendable incorporar otro elemento clave, el candelabro. Nuestra mesa romántica, aunque sea pequeña, acepta que dispongamos dos candelabros (uno a cada lado del centro floral). Las velas que elijamos pueden ser blancas, de color cera natural o por qué no, pueden ser rojo pasión.
Otros consejos prácticos a tener en cuenta en una velada romántica
Tener todo preparado a tiempo. Es vital si queremos que la velada sea perfecta. Lo importante es evitar ausencias innecesarias durante la cena, así que dejamos de lado la improvisación y la mítica frase: “Le quedan unos minutitos al pescado al horno”. Es decir, levántate lo menos posible de la mesa. Céntrate en tu pareja, disfruta de la conversación…
El champán nunca debe faltar para aligerar la cena romántica, para hacer hueco al postre.
Otra idea muy práctica y romántica es que dejéis sobre la mesa (como el que no quiere la cosa) cualquier detalle que le guste a tu pareja, que le recuerde momentos inolvidables que habéis pasado juntos; una cerámica de algún viaje, por ejemplo.
Mucho ojo con el ambiente externo a la mesa, no debe desviar demasiado la atención. Procurad que el ambiente, la decoración y la iluminación creen un ambiente acogedor, cálido, romántico. Siempre hay que acompañar la velada con música escogida para la ocasión.
Elige con mucho cuidado las recetas gastronómicas con las que vayas a agasajar a tu ‘media naranja’. Ten en cuenta que es una cena, así que platos sabrosos y ligeros. Para el postre, puedes recurrir a la canela, afrodisíaco natural.
Arréglate siempre para la velada, la vestimenta elegida tiene que ser especial… Día a día hay que seguir conquistando a la pareja.
No queremos que nos interrumpan durante la velada, así que móviles apagados (como en el cine)… La cena es (solo) de dos. Y los problemas del día a día, mejor los dejamos para el día siguiente.
Ya nos contaréis si habéis disfrutado de la velada romántica.
Comentarios (0)