La diversidad de hogares que hay hoy en día en nuestras ciudades es muy variada. Existen numerosas tipologías de viviendas, seguro que una para cada tipo de personas o familias que podamos imaginar. Sin embargo, aunque cada una de ellas esté adaptada a la forma de vida de sus inquilinos, todas deben ser acogedoras.
Organizar adecuadamente un hogar es un estupendo punto de partida para conseguir una casa cálida y agradable. Sobre todo, si se trata de un hogar pequeño. Las viviendas de 40-50 m² pueden ser un dolor de cabeza para sus habitantes si no se mantiene un orden. Toma nota de los siguientes trucos de distribución y organización para un hogar pequeño.
Replantea tus necesidades
Lo primero de todo es analizar en profundidad el uso que le vas a dar a tu hogar. Tu forma de vida es crucial antes de tomar decisiones. En un hogar de 50 m² no hay espacio para desaprovecharlo, así que cada rincón tiene que estar bien enfocado a resolver una necesidad en concreto.
Por ejemplo, si tenemos un trabajo presencial que no nos permite teletrabajar en ningún momento, seguramente no necesitemos un espacio de oficina, ni un escritorio. Podríamos dedicar ese hueco de nuestra casa para distribuirla de otra forma y ganar amplitud.
Igualmente, si somos personas de pasar mucho tiempo fuera de casa, deberíamos ceñirnos a la utilidad real que le vamos a dar. A veces, con una pequeña cocina, un sofá, una mesa, una tele y una cama es más que suficiente para vivir.
Por el contrario, si tenemos una gran afición o trabajo que requiera pasar muchas horas en casa, la cosa se complica. Tenemos que darle un poco más al coco para organizarlo todo, pero con cierta lógica y diseño, podemos hacerlo sin problema.
Según la geometría de la vivienda y su tamaño, tendremos que adaptar el espacio a nuestras necesidades y a partir de ahí distribuir la casa. Debemos conseguir que, pese a que este espacio sea el principal, todo funcione al unísono, y para ello tendremos que seguir los consejos de los siguientes puntos.
Mobiliario a las paredes
Las piezas de mobiliario en el centro de una estancia siempre crean circulaciones a su alrededor, que, si no tenemos el espacio suficiente para dotarlas de un uso concreto, pueden perderse como un espacio realmente inútil.
Para ello, siempre que nos sea posible, recurriremos a adosar los muebles a las paredes, o incluso colgarlos de ellas si es necesario. Algunas estanterías colgantes son realmente útiles y bonitas, y nos permiten a su vez aprovechar la parte inferior de la pared. O incluso la televisión, colgarla de la pared a una altura considerable nos libera el espacio del clásico mueble aparador y nos permite mayor flexibilidad en el salón.
También es muy interesante que estos muebles de la pared puedan desplazarse en algún momento y colocarse en una esquina o en el centro de la sala, si queremos realizar alguna actividad puntual.
Elementos multiusos
Uno de los mejores consejos, sin lugar a duda, es utilizar en todo momento mobiliario y accesorios que nos permitan realizar más de una acción. Ya no solo hablamos de la común cama que baja de la pared por la noche y se pliega por la mañana, sino de electrodomésticos, muebles o elementos auxiliares que puedan ser versátiles para distintos usos.
Además de conseguir tener casi todo a mano y evitar un exceso de recorridos para llegar a hacer diferentes cosas, ahorraremos espacio de almacenaje al reducir el número de elementos en la vivienda. Por ejemplo: una mesa de café convertible en mesa de comedor, un horno-microondas, una cama con canapé abatible, una lavadora-secadora…
Decoración sencilla
En cuanto a la decoración, por lo general, el minimalismo transmite paz y serenidad. Unos pocos accesorios bien escogidos son ideales para un espacio de dimensiones reducidas.
No deberíamos cargar la casa con muchos cuadros o con muchos objetos sin uso en las estanterías o encima de las mesas. Tenemos que mantener el espacio lo más libre posible de interferencias que generen la sensación de sobrecargado.
Por ejemplo, una pieza de decoración como una pequeña escultura es perfecta para decorar toda una vitrina de almacenaje visto. O una planta en un rincón de difícil acceso y al que no solemos hacer mucho caso, hará que todo el salón parezca más grande.
Decorar y mantener una casa pequeña requiere de la misma o mayor atención que uno grande. Una incidencia es posible en cualquier tipo de vivienda, así que recurrir al Seguro de Hogar MAPFRE es siempre una genial opción para nuestra vivienda.