Cómo elegir el mejor campamento de verano
Avada
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El curso escolar ya está acabando. Las piscinas ya han abierto y los niños y adolescentes se preparan para las semanas de sol y relajo que ya llegan. Las familias están sintiendo el verano, ya sea en la temperatura en la piel o en los planes en la cabeza. Sin importar si vas de viaje o te quedas en la Península, el verano es la época para disfrutar del tiempo libre que nos hemos ganado en la temporada de trabajo.
Por ello, los campamentos de verano son una opción magnífica. Por un lado, los niños tienen el lugar perfecto para desfogar toda la energía propia de la edad y aprender a convivir con la naturaleza y tiendas de campaña; por otro, los padres tienen la oportunidad de gozar de unos días de tranquilidad, en los que podrían incluso aprovechar para realizar mejoras en la casa.
En este artículo, vamos a repasar una serie de consejos aplicables a la hora de elegir un campamento de verano para tus hijos. Así podrás elegir el mejor dentro de las opciones de las que dispongas.
Conoce a tu hijo
El primer consejo es el más importante. Para elegir acertadamente un campamento de verano, es imprescindible saber hasta qué punto estará cómodo tu hijo en un entorno extraño. ¿Prefieres mandarlo a la playa o la montaña? ¿Al extranjero? ¿Con variedad de actividades o con el enfoque en unas en concreto? ¿Cuántos niños irán al campamento con él?
Todos estos son factores que debes preguntarte. Y si no los sabes, es siempre mejor consultar con las preferencias de tu hijo. Muchos niños se sentirán en su salsa en entornos muy rústicos, con paseos largos por el campo y noches durmiendo bajo las estrellas; mientras que otros estarán más acostumbrados a las comodidades de un espacio domesticado. Eso sí, a nadie le ha hecho mal sufrir un poco alejado de la vida fácil de la ciudad. Recuerda que solo se trata de un par de semanas o un mes, y que cuando vayas a recogerlos posiblemente se quieran quedar.
Los campamentos son lugares perfectos para conocer a nuevos amigos y aprender nuevas habilidades que pueden resultar muy útiles en un futuro. Si te preocupan los idiomas, existen campamentos especializados en una única lengua y que harán de la experiencia no solamente una diversión constante, sino una inmersión total en otro idioma, la mejor manera de aprenderlo.
Algunas consideraciones
Lo importante antes de elegir un campamento es hacer un balance entre los días que se pasará allí, las actividades disponibles y el precio. Algunos campamentos no permiten el contacto con los niños salvo emergencias, otros limitan los intercambios a cartas únicamente, y otros incluso permiten visitas de vez en cuando.
Hay que considerar bien el transporte y el equipo que necesitarán los niños para el campamento. La gran mayoría ofrece listas de lo imprescindible que tienen que llevar para poder tener una estancia cómoda. Hay que estudiar bien cómo serán las comidas durante su estancia, si estarán servidas por la organización o si tienen que llevar sus propios víveres.
Qué buscar a la hora de elegir
Los mejores campamentos siempre tendrán a alguien con quien puedas hablar antes, durante y después de la temporada. Aunque hay mucha variedad entre las opciones, sería bueno intentar encontrar un campamento que cumpla los siguientes requisitos:
- Una historia: aunque haya campamentos nuevos que sean geniales, muchos expertos recomiendan que uno que lleva décadas suele ser algo muy positivo. Que haya resistido al paso del tiempo indica una buena gestión.
- Una filosofía: hay que saber cuál es el enfoque de un campamento. ¿Arte? ¿Deporte? ¿Convivencia? ¿Liderazgo?
- Crear comunidad: los mejores estudian bien cómo juntar a los chavales para que tengan la experiencia más inclusiva para todos.
- Un equipo experto: además de buscar una buena relación entre monitores y niños (unos 10 niños por cada monitor), es importante ver que saben lo que hacen.
- Elección: los niños sienten que tienen mucha más libertad e independencia si no se ven forzados a realizar actividades que no quieren, y ven que tienen un abanico de posibilidades entre las que elegir.
No te pongas nervioso
Los niños no son los únicos que sufren ansiedad a la hora de irse de casa durante un período prolongado de tiempo. Una de las cosas más importantes que puedes hacer es intentar contagiar a tus hijos de la emoción de una experiencia nueva. Si sienten tus nervios, es probable que no se sientan cómodos yéndose.
Por ello, lo mejor es prepararles a las nuevas circunstancias y recordarles algunas medidas de seguridad y cómo contactar contigo en caso de que lo necesiten, que debería ser únicamente en las emergencias. Para lo demás, recuerda que el equipo de los campamentos suele estar bien preparado para afrontar cualquier problema que pueda surgir.
Y para estar aún mejor preparado, con un Seguro de Salud MAPFRE, tendrás garantizada la mejor asistencia sanitaria en caso de que pase cualquier percance. Informa a los monitores del campamento si tus hijos disponen de uno y los expertos se harán cargo si fuese necesario.
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