Generación T: los auténticos nativos digitales
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Si hasta ahora todos habíamos experimentado el mundo analógico y, de pronto, nos habíamos topado con el digital, los niños nacidos a partir de 2010 han vivido prácticamente con la tablet pegada a las manos. Son los auténticos nativos digitales que, desde muy temprana edad, han descubierto el mundo a través de las pantallas involucrando la vista, el oído, y un tercer sentido: el tacto. De ahí su nombre: generación Táctil o generación T.
El uso de Internet es, para ellos, un elemento normal que forma parte de su cotidianidad. Pero ¿cómo afecta y de qué forma define esta realidad a toda una generación?
¿Cómo es la generación T? Características
Los niños de la generación T han nacido en un mundo en el que las tecnologías han experimentado un avance exponencial. La conectividad y la velocidad son mayores, y la información que reciben es instantánea. Hiperconexión e inmediatez son las palabras que mejor les definen, pero no las únicas. Entre sus características se destacan las siguientes:
Son completamente nativos digitales
Según una encuesta realizada por la firma de seguridad informática AVG en diez países (entre ellos España), el 23 por ciento de los niños tiene presencia en la red incluso antes de nacer (ecografías e imágenes publicadas por sus padres durante el embarazo). Un porcentaje que aumenta tras el nacimiento y hasta los 6 años, llegando a representar el 81 por ciento.
Es una generación que no conoce el modo de vida analógico y que no se siente abrumada ante la hiperconexión.
Acusan mayor falta de atención
Les cuesta prestar atención por más de un breve lapso de tiempo. La hiperconexión y la gran cantidad de información que reciben constantemente hacen que la atención se agote antes, ya que la necesidad de ver algo nuevo les hace cambiar de tema rápidamente.
Buscan la inmediatez en todo
Desde los 3 años son capaces de controlar perfectamente los dispositivos con conexión a Internet. Mediante las pantallas táctiles obtienen una respuesta inmediata, y encuentran frustración cuando ven que no son capaces de adaptar esos procesos a los objetos analógicos. Por eso son impacientes, porque desde que han nacido han asimilado la norma “tocar y suceder”.
Les cuesta diferenciar lo privado de lo público
Desde su llegada al mundo se han acostumbrado a ver cómo todo se comparte en la red, lo cual les dificulta a la hora de establecer las diferencias entre lo que es privado de lo que es público. Esto comportará un problema de cara al futuro en cuanto a la seguridad de los datos que compartan en Internet.
Son autodidactas
Tienen Internet a su alcance, saben manejarlo y, gracias a ello, tienen acceso ilimitado a información de todo tipo.
Además, su uso de las nuevas tecnologías es intuitivo, no han necesitado una enseñanza previa.
Son más tolerantes
Gracias a la globalización y a la existencia de conexión a Internet en prácticamente todos los puntos del planeta, los niños de la generación T están acostumbrados a ver otros modos de vida, otras razas y otras culturas, lo que favorece que el choque entre culturas sea menor.
¿En qué se diferencia la generación T de la de sus padres?
La generación T son los hijos de la generación X (nacidos entre 1961 y 1979) y de los millennials (nacidos entre 1980 y los 1990).
La generación X (1961 – 1979)
La generación X, generación perdida o de Peter Pan es la primera que ha vivido con ordenadores. Vivió la llegada de Internet y supo adaptarse (no tanto como los millennials) a las nuevas tecnologías. Van siempre con prisa, son multitarea y llegan de forma tardía a la paternidad.
La generación Y o millennials (1980 – 1990)
Los que forman parte de la generación Y o millennials se han relacionado con las nuevas tecnologías desde su infancia y se han adaptado a ellas con soltura. Ya de adultos, están altamente vinculados a lo digital, pero no les limita la vida. Son capaces de abordar múltiples tareas con atención.
Diferencias con la generación T
La generación T, a diferencia de las anteriores, es la primera que no ha tenido referencia analógica en muchas de sus tareas habituales. La generación X y los millennials fueron descubriendo poco a poco las nuevas tecnologías, pero la generación T ha nacido con ellas ya presentes.
Esto hace que muestren mayor intuición y destreza en el manejo digital, incluso antes de aprender a leer o escribir. Para ellos es algo natural e innato. Además, la tecnología touchscreens ha favorecido que manejen perfectamente estos dispositivos desde los primeros meses de vida.
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