Con la llegada del verano llegan también las temidas olas de calor con sus altas temperaturas diurnas, pero sobre todo nocturnas que no te permiten descansar correctamente. Debido a ello es probable que te hayas planteado realizar una instalación de aire acondicionado en tu casa, pero no puedes hacer obras. En ese caso, podrás hacerte con un climatizador pingüino para refrescar tu casa.

Las ventajas del climatizador pingüino

Es probable que no puedas realizar obras en la fachada de tu edificio porque la comunidad de vecinos no te permita la instalación de un aparato de aire acondicionado. Por otro lado, si vives de alquiler, es muy posible que el dueño del inmueble no haya considerado la posibilidad de instalarte un aparato de aire acondicionado para poder garantizar la supervivencia en la casa durante el periodo estival.

Puedes optar por intentar mantener tu casa fresca con los métodos tradicionales, como cerrar las persianas para que no entre el sol, colocar ventiladores…etc. Pero en muchos casos, el mal aislamiento de la vivienda hace que estas medidas sean del todo insuficientes. La mejor opción en estos casos es recurrir a mejorar el aislamiento de la vivienda a través de ventanas más eficientes y la incorporación de materiales aislantes en las paredes. Al igual que con la instalación del aire acondicionado, aquí también puedes encontrarte con el problema de ser el inquilino. En ese caso, no vas a poder hacer nada si el dueño no quiere invertir en mejorar la calidad de la vivienda.

De modo que  ya no soportas más las temperaturas y el ventilador parece la boca abierta de un dragón expulsando fuego puedes comprar un aparato climatizador portátil para tu casa. Sus ventajas consisten en:

  • Son una buena opción cuando no puedes hacer obras o solo los necesitas para climatizar una habitación en concreto.
  • Se pueden mover de una estancia  a otra cómodamente. Puedes tenerlo en el salón por la mañana y en la alcoba por la noche.
  • Su instalación es muy fácil ya que tan solo requieren ser ubicados junto a una ventana y a una toma de corriente para empezar a funcionar.
  • Los materiales aislantes que incluye el equipo duran varios años, pero si necesitas reemplazarlos o quieres dejarlos fijos en otros estancias de tu casa puedes encontrarlos en los centros de bricolajes por apenas 12 euros.
  • Su mantenimiento es muy sencillo tan solo requieren drenar el agua cada cierto tiempo a través del tapón que incluyen en la parte trasera y limpiar el filtro cada dos o tres semanas. Siempre puedes reusar el agua del aire acondicionado para otras cosas, como la limpieza del hogar. De esta manera disfrutarás de tu aire durante mucho tiempo.

Funcionamiento y desventajas de un pingüino

Estos aparatos llevan incorporado un tubo o manguera que se conecta a la máquina y se encaja en la venta para que el aire caliente salga al exterior. Incluyen un kit de aislamiento para que coloques en la ventana que consiste en una espuma aislante y un panel metálico ajustable en el que esta se introduce. El panel lleva una abertura en la que encaja el tubo a través de una boca y que se ajusta fácilmente a una ventana corredera.

El funcionamiento de estos pingüinos es similar al de los aires acondicionados de ventana o Split que se instalan en el exterior de la vivienda. Aspiran el aire caliente y húmedo y lo enfrían además de deshumidificarlo. A continuación lo devuelven fresco y seco a la habitación. El calor extraído sale al exterior a través del tubo que hemos colocado previamente.

El principal problema de estos equipos portátiles es que son muy ruidosos debido a que incluyen en su interior un compresor que permite que el aire se enfríe rápidamente. Además tienen un consumo más elevado que el de un aire acondicionado normal.

Su precio es igual o superior a un equipo de ventana y puede rondar entre los 180 y los 600 euros dependiendo del tamaño y la potencia del aparato. Para refrigerar correctamente cada estancia es necesario que busques el dispositivo que se adapte al tamaño de la habitación..

Pros y contras de los climatizadores por evaporación

Otra opción para tener aire fresco sin necesidad de realizar obras y con un precio muy asequible, es hacerte con un climatizador por evaporación. Estos dispositivos no llevan ningún tubo  ya que no evacúan el aire caliente al exterior y se pueden instalar en cualquier parte. Además podrás llevarlos de un lado a otro sin problemas para refrigerar cualquier estancia. Lo cierto es que también presentan algunas ventajas:

  • A  diferencia de los aires acondicionados portátiles, son muy silenciosos.
  • Su consumo es muy bajo, por lo que serán ideales si quieres ahorrar energía.  Al no disponer de comprensor no es necesaria tanta potencia.
  • Su precio es mucho más asequible que el de un pingüino ya que oscila entre los 50 y los 200 euros, pero su poder de refrigeración está mucho más sujeto a situaciones ambientales determinadas.

Su funcionamiento es muy sencillo y similar al de un ventilador. Estos aparatos disponen de un depósito que deberás rellenar con agua fría o hielo. El tamaño del aparato y del depósito dependerá del tamaño de la estancia que quieras enfriar. Una vez encendido,  el aire caliente se absorbe a través de sus rejillas y circula por el interior de la máquina por un circuito de agua fría. El aire resultante se expulsa al exterior. Son capaces de enfriar el ambiente entre 5 y 12 grados, pero su eficacia depende de la humedad relativa del ambiente.

Su comportamiento es más eficaz en zonas calurosas y secas y no es recomendable en zonas con mucha humedad. Para que su funcionamiento sea correcto es necesario que tengas abiertas las puertas y ventanas ya que se necesita que el aire se renueve continuamente.

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