La elección del colchón es una decisión que no debe tomarse a la ligera, ya que puede influir de forma considerable en la calidad del sueño. Pero, ¿qué es mejor? ¿colchón viscoelástico o de muelles? La respuesta, como en muchos aspectos de la vida, es muy amplia, puesto que depende de tus costumbres al dormir, de la posición que adoptas, si compartes la cama, etc. A continuación, analizamos las diferencias y características de cada modalidad para que puedas elegir la que mejor se adapte a tus necesidades.
Colchón de muelles o viscoelástico: diferencias
MUELLES TRADICIONALES | MUELLES ENSACADOS | VISCOELÁSTICO | |
Característica principal | Transpiración | Estabilidad | Ergonomía |
Firmeza | Alta | Media o alta | Media o alta |
Adaptabilidad | Media | Media | Baja |
Transpiración | Alta | Alta | Media o baja |
Retiene la temperatura | No | No | Sí |
Efecto huella | No | No | Sí |
Resistencia a los ácaros | Media | Media | Alta |
Durabilidad | Media | Media o alta | Alta |
Independencia de lechos | No | Sí | Sí |
Caras de uso | Dos | Dos | Una o dos |
Peso | Ligero | Ligero | Pesado |
Colchón de muelles
Son los clásicos de toda la vida, aquellos que tienen una estructura de muelles recubierta por múltiples capas de diversos materiales (fibra, látex, foam, viscoelástica, etc.). Según el tipo de muelles de su núcleo pueden ser:
- Colchones de muelles biónicos: formados por muelles metálicos distribuidos en sentido vertical y unidos entre sí por un hilo del mismo material.
- Colchones de muelles ensacados: fabricados con muelles independientes aislados en un saco de tela, de ahí su nombre. Esta tecnología reduce el ruido que produce el metal de los muelles al rozar unos con otros y se adapta mejor a la fisionomía del durmiente reduciendo la sensación de flexibilidad.
Sean del tipo que sean, en general, los colchones de muelles se caracterizan por ofrecen mayor firmeza y por su capacidad de transpiración, lo que contribuye a optimizar su higiene. No requieren de mucho mantenimiento, más allá de airearlos o voltearlos cada cierto tiempo para evitar que se deformen, ya que, a diferencia de los viscoelásticos, sí tienen efecto memoria.
Colchón de viscoelástica
La viscoelástica es un material sintético diseñado por la NASA para el programa espacial en los años sesenta, aunque no se introdujo en los hogares hasta la década de los noventa. Hay que resaltar que no existen colchones fabricados íntegramente con viscoelástica, ya que es un material muy blando. Para evitar los problemas que causaría, se fabrica con un núcleo de otro material, como espuma HR, látex o muelles. Sobre este armazón se añaden diferentes capas de viscoelástica, que es lo que aporta confort. Cuanto mayor sea esta capa de acolchado, mayor será su adaptabilidad, eso sí, no puede llegar a la misma que un colchón de muelles. Sin embargo, se adecúa muy bien a la ergonomía del durmiente, lo que hace que sea muy conveniente para personas que sufren de dolores lumbares, musculares o articulares. Y no tiene efecto memoria, por lo que, una vez que se deja de hacer presión sobre el colchón, éste recupera su forma original. En cuanto a su firmeza, aunque depende de la densidad del núcleo, en general es más blando que otras opciones. Otra característica importante es que es termoadaptable (se adapta a la temperatura corporal) y termosensible (se ablanda con el calor y se endurece con el frío). Al ser un material menos poroso que el de muelles, requiere una ventilación más frecuente y se debe evitar su uso en ambiente húmedos.
¿Qué elegir?
Como ves, cada modalidad de colchón tiene sus ventajas e inconvenientes. Por eso, lo mejor es elegir en función de tus preferencias a la hora de dormir. Y si quieres conciliar el sueño a pierna suelta, tu Seguro de Hogar MAPFRE te ayuda a olvidarte de las preocupaciones que puedan causarte el mantenimiento de tu casa, con coberturas y servicios que se adaptan a tus necesidades.