La eficiencia energética es sin duda uno de los temas más importantes del siglo actual. Las ciudades, los coches y las viviendas están destinadas a respetar al máximo nuestro planeta. Y precisamente este es el objetivo principal de las casas pasivas, o más conocidas por su término alemán “passivhaus”. A continuación, veremos qué son exactamente y sus características principales.
¿Qué son las passivhaus?
Las passivhaus son un tipo de vivienda diseñada y construida de manera que, mediante todos sus sistemas, bien sean constructivos, estructurales o a nivel de instalaciones, están orientadas a ser lo más eficientes posibles, manteniendo siempre la temperatura y el grado de confort necesario para el buen desarrollo de la vida de sus ocupantes.
El término “passivhaus” proviene de su origen alemán de finales del siglo XX, donde se empezó a estudiar las posibilidades que la vivienda podía ofrecer únicamente mediante sus preceptos constructivos y de diseño. Es decir, prestando especial atención a los elementos que, de forma pasiva, pueden ahorrar considerablemente la demanda energética de la vivienda, como podrían ser los aislamientos térmicos o la orientación de las ventanas para mantener la temperatura estable todo el año.
Características de las passivhaus
Diseño y orientación de la vivienda
Teniendo en cuenta las condiciones climáticas del lugar y las temperaturas medias anuales, diseñar y orientar la vivienda para aprovechar al máximo los recursos naturales y definir adecuadamente los tipos de aislamiento.
Una vivienda passivhaus puede ser drásticamente distinta en función de la posición geográfica en la que se encuentre, pero todas ellas deben asegurar el grado de confort en su interior. Por ejemplo, una casa pasiva en el norte de Europa tendrá unos cerramientos, aislamientos y acabados bastantes diferentes que en el sur de España. Por lo tanto, su ubicación será el principal punto de partida para el diseño.
Cada situación es presa de sus propias particularidades y por lo tanto, hay que tener en cuenta cuestiones tan importantes como los vientos, la orientación, la humedad relativa… Y diseñar la vivienda con cierta sensibilidad al respecto. Por ejemplo, en nuestro hemisferio norte, la abundancia de luz viene siempre desde la orientación sur y la falta de sol, desde la orientación norte. Por lo tanto, siempre es más recomendable abrir grandes ventanales al norte para intentar captar toda la iluminación natural, a la vez que, por ejemplo, en España, diseñar ventanas más pequeñas al sur para protegernos del abundante calor en verano.
Cerramientos y envolvente de la vivienda
Seguramente los cerramientos sean la cuestión principal de las passivhaus, ya que son las paredes y cubiertas los elementos constructivos de cualquier vivienda que están en continuo contacto con el exterior.
Es muy importante acertar con el tipo de aislamiento que colocaremos en el interior de nuestros muros, pudiendo escoger entre una gran variedad de opciones, desde la clásica lana de roca hasta paneles más sofisticados como los sistemas Sate que consiguen pasar totalmente por el exterior de la tradicional hoja de ladrillo para asegurarnos un correcto aislamiento en los cantos de forjados y caras exteriores de pilares.
Carpinterías interiores y exteriores
Las ventanas suelen ser el principal punto clave de pérdidas de calor de cualquier vivienda. Es importante contar con los vidrios adecuados, siempre con su respectiva cámara de aire, es decir, varios vidrios laminados que, serán más o menos gruesos en función de la demanda climática de la zona.
Pero, los puntos más críticos siempre son las carpinterías, así que es importante evitar a toda costa los puentes térmicos utilizando carpinterías de PVC o aluminio con rotura de puentes térmicos de alta calidad y asegurando siempre una correcta instalación de los mismos, intentando sellar todas las juntas en la medida de lo posible.
Sistemas de climatización
Las passivhaus no solo prestan atención a los sistemas constructivos, también es importante asegurar unos sistemas energéticos eficientes que complementen a las cuestiones de diseño.
Existen diversos sistemas eficientes para generar confort, desde placas solares, fotovoltaica, geotermia o aerotermia.
¿Cómo conseguir el certificado passivhaus?
El certificado passivhaus se creó para establecer unos estándares mínimos globales para una vivienda sostenible, es decir, que, gracias a sus características, pudieran ahorrar considerablemente la cantidad de energía demandada.
Estos parámetros tienen en consideración cuestiones de calidad arquitectónica, constructiva y de los materiales empleados en la construcción.
En un principio, el certificado Passivhaus era emitido exclusivamente por un instituto alemán de la vivienda, sin embargo, actualmente ya tenemos en España algunas empresas con homologación oficial para emitir dichos certificados.
Para conseguirlo, hay que proyectar y construir nuestra vivienda de obra nueva o de reforma respetando todos los estándares que nos marcan su norma.
El grado de confort es vital para el buen funcionamiento de cualquier casa, sin embargo, también es importante contar con el Seguro de Hogar MAPFRE para estar tranquilos protegidos en nuestra vivienda.