En casa si sabes cómo lavar un plumas, puedes. Es importante lo primero observar los consejos y recomendaciones del fabricante de tu prenda, pero como norma general este tipo de prendas de abrigo pueden lavarse de forma similar para conseguir el mejor resultado y la máxima durabilidad a largo plazo.
Pero no olvides seguir las instrucciones y estos consejos para evitar averías en tu lavadora que quizá no cubra el seguro.
¿De qué está hecho tu plumas?
Se habla de prendas rellenas de plumas tanto en el caso de plumas de origen natural –oca o pato- como de fibras sintéticas de poliéster huecas que imitan las naturales de las aves para conseguir una sensación de ligereza y calidez muy similares.
Chaquetas, abrigos, prendas deportivas, sacos de dormir, rellenos nórdicos… entre otros están habitualmente rellenos de plumas para conseguir ese efecto tan deseado cuando las temperaturas caen en picado: calor sobre el cuerpo, pero sin sensación de peso o agobio sobre la piel.
Lo más sencillo y también lo más certero es que confirmes el origen y composición de tu plumas en la etiqueta de la prenda, además aprovecha para leer los consejos de lavado, cuidados y mantenimiento. Las prendas de este tipo exigen un cuidado especial, pero a cambio ofrecen una gran durabilidad en el tiempo. Algunos fabricantes solo aconsejan la limpieza en seco.
Guía para lavar un plumas en la lavadora de casa
Para lavar ropa con interior de plumas en casa y siempre que no esté contraindicado en el etiquetado de la ropa, lo primero que tienes que hacer es elegir si lo harás a mano o a máquina –en la lavadora-. Lo más fácil es que optes por la lavadora porque a mano es más pesado, complicado y el resultado puede ser peor.
1. Prepara el abrigo antes de meterlo en el tambor de la lavadora.
Dale la vuelta, cierra velcros y cremalleras para evitar enganchones o que la prenda se desgarre accidentalmente durante el lavado. No olvides revisar el interior de todos los bolsillos para que no quede nada olvidado dentro.
2. A la lavadora
Mete la prenda dentro de la lavadora, sola. No es cuestión de separar la ropa blanca de la lavadora, esto es por el material del abrigo. Aunque no sea muy grande, las prendas con relleno de pluma necesitan espacio y cuanto más tengan mejor se lavará, evitando que las plumas se espachurren.
3. Selección del programa
Lo más recomendable es usar un programa para ropa delicada, lana o similar. La mayor parte de las lavadoras domésticas lo incluyen. En cualquier caso, hay dos factores clave a vigilar: la temperatura y el centrifugado. La duración del programa no es tan importante, puede ser un ciclo más largo siempre que no superes las temperaturas aconsejadas y el centrifugado sea ligero.
- Mejor en frío y nunca por encima de los 40 grados.
- Evítalo o elige los más suaves y menos agresivos: máximo 400 revoluciones.
4. Añade detergente
Atención en este punto: los plumas no se llevan bien con el suavizante. Evita siempre añadir, por tanto, este aditivo a las coladas de este tipo de prendas. En cuanto al jabón o detergente, apuesta por los más delicados y mejor, poca cantidad. Si tienes muchas prendas de plumón o lo consideras práctico puedes comprar un producto específico para este tipo de prendas.
5. Secado
Cuando el programa de la lavadora indique el fin, saca la prenda lo antes posible. Puedes usar la secadora aunque tendrás que cuidar el programa para no dañar las plumas y es recomendable introducir pelotas de tenis junto al abrigo para asegurar un mejor aireado de la prenda dentro de la secadora y que las plumas no se apelmacen.
Si secas al aire, mejor en plano en zonas muy ventiladas y es aconsejable girar la prenda cada dos horas, moviendo el interior para que las plumas se vayan secando de forma uniforme y sin acumularse entre ellas o en un solo lado del abrigo. Ten en cuenta que especialmente las plumas naturales tardan mucho en secarse, pero que es imprescindible que estén completamente secas antes de guardarlas.
Lavar a mano un plumas
Si tu lavadora no tiene funciones óptimas para poder meter tu plumas, un recurso es lavarlo a mano aunque es un trabajo más arduo y pesado.
- Necesitas un espacio grande como una bañera o similar.
- La prenda debe meterse en el agua, pero siempre en un lugar donde no este comprimida ni espachurrada.
- Usa agua fría o tibia y añade poco detergente.
- Enjuaga de manera abundante hasta eliminar toda la espuma y/o restos de jabón. Es un proceso tedioso y que te llevará tiempo. Especialmente si se trata de un elemento grande y voluminoso.
- Nunca escurras retorciendo o aplastando el interior del plumas.
Consejos extras para el cuidado de una prenda de plumas
- Lava siempre de manera independiente cada prenda
- No uses suavizante
- Elige centrifugados cortos y suaves
- Seca a conciencia la prenda
- Con el plumas seco dedica un rato a darle volumen y ahuecarlo para que las plumas ocupen su espacio.
- No almacenes este tipo de prendas con peso sobre ellas, mejor colgadas de una percha.
- No laves más de dos veces por temporada las prendas con pluma natural o acortaras mucho su vida útil.
Recuerda, no metas más cosas en el tambor y cuida tu lavadora y tenla siempre a punto, gracias a la cobertura de electrodomésticos que te ofrece tu Seguro de Hogar MAPFRE.