Lo primero a tener en cuenta es la edad del bebé. Lo mejor es separar la ropa por tamaños de 0 a 3 meses, de 3 a 6 y de 6 a 12. Los bebés crecen muy rápido, irás viendo cómo cambian de talla y así podrás tener el siguiente tamaño siempre preparado.

Si utilizas una cómoda con el cambiador encima (los que son tipo colchoneta) para los cambios de tu bebé, los cajones de debajo deberán tener la ropita de más uso: aparte de los pañales, que también pueden ir en un sitio aparte especial para ellos, debes tener bodis, pantalones, camisetas y pijamitas.

Los bodis son la ropa interior que más usan los bebés y los primeros meses hay que cambiarla varias veces al día, por lo que debes tener preparados como mínimo 4 o 5.

Ordena los cajones

Es una buena opción para organizar la ropa del bebé: utilizar cajones y separar la ropa por categorías.

En el primer cajón, el que está más cerca del cambiador, coloca los pijamas y la ropa interior. Si te cabe por el tamaño de los cajones, pon también los gorritos y guantes si hace frío, o gorros para protegerle del sol si es verano.

En el segundo, camisetas, pantalones o vestidos doblados y zapatos o zapatillas. También los calcetines y patucos.

Deja los cajones inferiores para toallas, jerséis más grandes y ropa que ocupe más espacio.

El armario puedes utilizarlo para colgar abrigos, ropa más arreglada, bufandas y calzado de menos uso. Es más práctico que la ropa del día a día esté al lado de tu bebé. Para colgar de la barra puedes comprar un organizador de compartimentos, que te será muy útil para calzado o ropa doblada.

Es importante también la época en la que nace el bebé, ya que a partir de octubre la ropa deberá ser más gruesa y por lo tanto ocupará más espacio.

Trucos para organizar la ropa

Comenzamos con 2 trucos que te ayudarán, ya que los cajones suelen ser grandes para el tamaño de la ropa de los bebés:

  • Organizadores, que pueden ser de diferentes tamaños y con distinto número de compartimentos. Lo mejor es que ocupen todo el espacio del interior del cajón.

  • Ropa doblada en vertical, para tenerlo todo a la vista. En este vídeo te enseñamos cómo hacerlo:

    Otra idea muy buena es ordenar la ropa por colores, así te será muy fácil vestirle. Para ello, empieza por los colores más claros como el blanco y el beige y ve ascendiendo de tonalidades, hasta terminar con los más oscuros. De esta manera, cuando decidas de qué color quieres vestir hoy a tu bebé, lo tendrás muy fácil para elegir su ropita de un primer vistazo. Esto puedes hacerlo tanto con la ropa doblada de los cajones como con la ropa colgada en perchas y la que colocas en las baldas del interior de los armarios. Es una forma muy fácil de encontrar una prenda concreta, por ejemplo. Si no está en su grupo de color, ya sabes que está para lavar, o tendida, o para planchar.

  • Para las prendas de punto, utiliza bolsas de tela o papel de seda, así evitarás que se enganche y le salgan bolitas típicas de la lana. Recuerda lavarla siempre a mano o en ciclos especiales en la lavadora.

  • Los percheros portátiles también te darán mucho juego, ya que en ellos puedes colgar la ropa del día siguiente o incluso la de semana, y lo mejor es que puedes desplazarlos por la casa sin ningún esfuerzo. Son una estupenda manera de obtener espacio extra.

  • Utiliza bolsas, cajas y etiquetas para marcarlos. Las bolsas de envasado al vacío son excelentes para ahorrar espacio: la ropa de entretiempo puede ir en el canapé de alguna cama o en el maletero del armario, o trastero o garaje si lo tienes. Para ello, las etiquetas serán tus mejores amigas. Busca un marcador resistente al agua por si hay humedades, o directamente compra etiquetas con los nombres (“camisetas”, “ropa de cama”, “ropa de invierno”) ya escritos.

  • Recuerda que antes de guardar la ropa, debes asegurarte de que está recién lavada y completamente seca, y además debes envolverla con cuidado en bolsas de tela o papel de seda (tal y como te hemos recomendado para las prendas de punto) para conservarla en condiciones óptimas y que te dure mucho tiempo.

Además te recomendamos contratar siempre un Seguro de Hogar MAPFRE para aquellos imprevistos en los que necesites una ayuda extra.

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