El éxito de que consigas al quitar marcas y manchas de las paredes sin tener que pintar depende mucho del tipo de pared al que te enfrentes, especialmente a la calidad y al tipo de pintura o revestimiento que tenga tu casa. Como pauta general, recuerda siempre que cuanto antes intentes eliminar la mancha, mejor será el resultado y menor el trabajo de limpieza.
La buena noticia es que muchas de las soluciones más prácticas para deshacerse de esas manchas enojosas están al alcance de la mano y en cualquier casa.
Agua y jabón
Para las pinturas plásticas, lavables y en general, las que tienen más brillo y menos porosidad, el agua tibia y un jabón neutro puede ser suficiente. Frota con una esponja suave o con un cepillo más o menos grande según el tamaño de la mancha, enjuaga con un trapo húmedo para quitar los restos de jabón y deja secar. Es muy probable que las manchas más superficiales y sencillas desaparezcan.
Bicarbonato
Una mezcla de agua y bicarbonato aplicada sobre las manchas de bolígrafo, pintura, rotulador… de la pared suele ser una solución eficaz para manchas resistentes. Se trata de hacer una pasta de bicarbonato para luego extenderla sobre la mancha, dejándola actuar y frotando. Verás cómo la mancha se va desdibujando hasta desaparecer.
Pasta de dientes
Este es un recurso casero que resulta muy práctico por lo fácil y socorrido que puede resultar en el momento en que se produce la mancha. Simplemente debes aplicar la pasta dentífrica sobre la marca y dejar actuar unos minutos, después limpia y enjuaga suavemente. Es una forma eficaz contra manchas superficiales y roces negros causados por presión de muebles u objetos de decoración sobre la pared.
Vinagre
Una vez más el vinagre blanco se presenta como el perfecto limpiador del hogar, y las paredes no son una excepción. En los casos de manchas resistentes y paredes delicadas, puedes probar a eliminar manchas y marcas con una solución de agua y con vinagre. Además de quitar la mancha, la pared quedará perfectamente limpia e higienizada.
Para poner en práctica cualquiera de estos cuatro métodos para quitar marcas y manchas de las paredes sin tener que pintar, es importante que limites siempre la cantidad de agua, ya que cuanto menos empapes la pared, mejor será el resultado y menor el desperfecto. Además, en el caso de pinturas o paredes con revestimientos especialmente delicados, siempre es recomendable que pruebes estas soluciones de limpieza en zonas reducidas y poco visibles, para comprobar que no estropean de forma definitiva la pintura o la pared.
Estos remedios caseros para quitar marcas y manchas de las paredes sin tener que pintar son sencillos y económicos; no obstante, también existe la posibilidad de recurrir a productos de limpieza específicos para paredes que puedes encontrar en tiendas y comercios especializados. En esos casos, atiende siempre las recomendaciones de uso y precauciones del fabricante, pueden ser productos agresivos.
El buen estado de tus paredes y del resto de tu casa también es una prioridad para tu Seguro de Hogar MAPFRE que colabora activamente en la protección de tu vivienda.