Con la llegada del buen tiempo, cambiamos nuestro armario. Los pantalones largos dejan paso a los cortos, los abrigos a las camisetas y las botas a las sandalias. ¿También haces lo mismo con la ropa de tu hogar? Del mismo modo que en el mes de agosto no usas las mantas o el edredón nórdico de tu cama, también existe la posibilidad de usar otro tipo de sábanas, más fresquitas y con un tejido más gustoso. Son las conocidas sábanas de verano.
Qué son las sábanas de verano
Aunque no lo creas, existen diferencias entre las sábanas de verano y las de invierno. A lo mejor nunca te habías parado a pensarlo, pero con las altas temperaturas, se hace necesario contar con materiales que faciliten la traspiración y hagan que nos encontremos frescos cuando nos vamos a dormir.
En invierno se suelen usar sábanas realizadas con fibras polares como la coralina o la felpa que ayudan a mantener una temperatura más elevada. En verano, sin embargo, es necesario contar con unas que nos ayuden a regular correctamente la temperatura de nuestro cuerpo.
¿Qué características deben tener las sábanas de verano?
Para poder mantener la temperatura adecuada mientras dormimos, nuestras sábanas son más importantes de lo que pensamos.
Si quieres elegir las correctas para los meses más calurosos, deberás fijarte en que éstas cumplan una serie de requisitos:
- Tener un tacto suave.
- Ser transpirables.
- Que puedan lavarse fácilmente.
Como en los meses de verano es más común sudar mientras se duerme, es lógico que cambiemos las sábanas con más frecuencia que en invierno. El sudor puede impregnarse en los tejidos y hacer que tu ropa de cama no invite a descansar con placidez. Además, debes tener en cuenta que cuando las sábanas están recién lavadas, gracias a su aroma, aportan una mayor sensación de frescor.
Tejidos para el verano
A la hora de seleccionar unas sábanas para verano de manera correcta, debemos fijarnos sobre todo en los materiales con los que están fabricadas, cuanto más naturales sean estos, mejor.
A continuación, te mostramos algunos tejidos idóneos para conseguir mantenerte fresco mientras duermes en verano.
Fuente: https://cutt.ly/IyV0tEq
Lino
El lino es el tejido por excelencia del verano ya que es muy resistente, ligero y suave. Aunque no lo creas, se usa con mucha frecuencia para producir sábanas, ya que mantienen a raya las bacterias y hongos.
Otra de sus ventajas es que los ácaros no se adhieren a sus fibras y es capaz de eliminar los olores. Se lavan y secan con facilidad, pero son bastante caras.
Algodón
Es una de las fibras naturales más utilizada a la hora de fabricar ropa de cualquier tipo, sobre todo porque es un material muy transpirable y sencillo de cuidar.
El algodón es suave e imprescindible si tienes algún tipo de alergia. Debido a que se seca muy rápido, evita la aparición de hongos. Aunque los tejidos de algodón son sencillos de cuidar, procura lavarlos siempre con agua fría y no uses secadora para evitar que se encojan. Así, te durarán más tiempo.
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Compuestas
En el mercado encontrarás, sobre todo, sábanas realizadas con mezcla de tejidos. En la mayoría de ellas, el componente principal es el algodón que al mezclarse con otras fibras crea un tejido sintético fresco y sobre todo asequible.
Por otro lado, estas sábanas, a diferencia de aquellas que están fabricadas con un solo tejido, se arrugan menos y son más sencillas de planchar. Serán ideales para aquellas personas a las que no les gusten estas tareas.
Elegir las sábanas adecuadas para cada época del año y mantener una correcta limpieza de las mismas te ayudará a descansar mejor por las noches para poder levantarte mejor al día siguiente.
Aunque los días de verano a veces es complicado dormir, los tejidos que uses y los trucos para mantener fresca tu casa te ayudarán a conseguir un sueño reparador.