Planchar la ropa suele ser una de las tareas más tediosas del hogar. Por esa razón, te proponemos una serie de trucos que permiten que una prenda pueda ser alisada de una manera rápida y fácil. Aunque a veces el resultado no es comprable al que puede realizarse con una plancha profesional, sí que pueden ser consejos que pueden ayudar a eliminar una arruga puntual o permitir que aunque se esté de viaje siempre se vista de manera fantástica.
Cómo lavar para no tener que planchar la ropa
- Evita centrifugar a una gran velocidad. Es cierto que el centrifugado permite secar la ropa, pero sin embargo hace que se produzcan arrugas durante el proceso. Por esa razón uno de los trucos para no planchar la ropa más usados es evitar esta función, especialmente si se puede tender al aire durante los meses de más calor.
- Separa la colada. Cada tejido se comporta de manera diferente y, por lo tanto, necesita un tiempo determinado en la lavadora. Si se separa la indumentaria antes de introducirla en la maquinaria, se podrá configurar el programa más acorde para cada tipo. También es aconsejable no mezclar ropa ligera con elementos pesados.
- No sobrecargues la lavadora. Si se llena en exceso el tambor, la indumentaria se apelmaza, lo que hace que se formen arrugas y que posteriormente sea mucho más complicada de alisar.
- Cuelga la ropa cuando acabe el lavado. No dejes pasar el tiempo y recoge la ropa de manera inmediata a que termine la lavadora. En caso contrario no solamente cogerá olor a humedad, sino que serán más difíciles de quitar los pliegues que se hayan formado.
Cómo tender para no tener que planchar la ropa
- Estira la ropa rápidamente. Tras usar la secadora es conveniente no dejar que pase el tiempo y colgar de manera estirada los vestidos. De este modo se consigue que no se formen arrugas y que no sea necesario usar la plancha.
- Evita pinzas muy apretadas. Si son muy fuertes pueden quedar llamativas marcas que resultan difíciles de quitar si no es planchando la ropa.
- Cuelga los vestidos en perchas. Utilizando esta técnica, la prenda conservará su forma y no se necesitará planchar la ropa.
- Cuelga la ropa por las costuras. De este modo se puede estirar mejor y además se disimula mejor las posibles marcas que dejen las pinzas.
Trucos prácticos para no tener que planchar la ropa
- Aprovecha el vapor. El vapor de agua que se forma a tomar una ducha caliente puede ser útil para no tener que volver a planchar la ropa. Si antes de que desaparezca el vaho cuelgas camisas o vestidos en perchas, conseguirás que desaparezcan las arrugas.
- Utiliza la plancha de pelo para alisar los cuellos de las camisas. Esta parte de la prenda es la más visible y debe de estar impoluta. Si no se dispone de plancha de ropa, se puede usar el alisador para estirarlos y lucir espectacular.
- Invierte en un vaporizador de ropa. Se trata de una opción que permite disponer de una prenda impecable sin necesidad de planchar la ropa
- Compra prendas fáciles de planchar. Conocer el tejido en el que está confeccionada la ropa que se compra es útil para conocer su calidad y su comportamiento ante la plancha. Las prendas de algodón se arrugan con facilidad, pero si incluye fibras de otros materiales como poliéster se convierte en una indumentaria mucho más sencilla de alisar. Algunos fabricantes realizan modelos especiales con la etiqueta Easy Iron que permiten realizar esta labor de una manera más simple.
Se puede evitar tener que planchar ropa si se ponen en práctica algunos de los trucos enumerados anteriormente. De igual manera, se pueden evitar sustos innecesarios en la vivienda protegiéndola con el Seguro de Hogar MAPFRE y su amplia cobertura.