3 soluciones si te hacen daño los zapatos
Avada
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Los zapatos de tacón estilizan la figura, confieren estilo al outfit final y además son el mejor pretexto para sacar a relucir nuestro lado creativo: los hay de infinitas formas, diseño y colores, lo que nos permite jugar mejor con todas sus posibilidades. Son un básico en el armario de cualquier mujer y el mejor recurso para convertir un look sencillo en otro más elegante.
Sin embargo, no todo son bondades. Los zapatos de tacón son tan amados como odiados, y la razón no es otra que el dolor de pies que causan muchos de ellos. Ya lo decía Christian Louboutin: “los tacones son un doloroso placer”, pero por suerte es algo que tiene solución.
3 remedios contra el dolor de pies por los tacones
Como en otras muchas ocasiones, los remedios naturales son tan eficaces como respetuosos con el medio ambiente y la sostenibilidad. Además, están al alcance de todos ya que para hacerlos se recurre a productos que podemos encontrar en cualquier hogar. Toma nota de estos consejos y olvídate de llevar unas manoletinas de repuesto cada vez que vayas a una fiesta.
- Sal de Epsom. Vierte en un barreño un litro de agua, una cantidad generosa de sal de Epsom, aceite esencial de lavanda, eucalipto o menta o una infusión de manzanilla. La sal de Epson es un remedio muy antiguo y eficaz con propiedades antiinflamatorias y que reduce los dolores musculares, entre otras bondades. Al disolverse en el agua, libera iones de sulfato y magnesio que son absorbidos por la piel para aprovechar todas sus propiedades.
- Baño de contrastes. Llena dos recipientes de agua, uno caliente y otro fría. Sumerge los pies en uno de ellos durante cinco minutos y después alterna con el otro recipiente. Repite este proceso varias veces hasta que notes cómo se descongestiona toda la zona.
- Hidratante. Después de la ducha, incorpora en tu rutina diaria una hidratante refrescante para pies a base de menta o eucalipto. Aplícala mediante un masaje suave pero enérgico.
Adelántate al dolor de pies
El dicho aquel de que “para lucir hay que sufrir” tiene los días contados. Con estos sencillos remedios conseguirás acabar con el dolor de pies que suele ir asociado a los zapatos de tacón antes de que aparezca.
- Ejercicio para pies. Existen algunos trucos que permiten evitar el dolor de pies adoptando ciertas rutinas y costumbres, como realizar ejercicios para fortalecer la pierna y el pie. Antes de ponerte tus stilettos preferidos, camina descalza durante diez minutos. Después, dedica otro tanto a estirar y encoger los dedos. A continuación, con las piernas juntas y rectas ponte de puntillas y regresa a tu posición inicial. Repite este ejercicio de sube y baja durante un rato para ayudar a los gemelos a mantener el pie empinado cuando te pongas los zapatos.
- Almohadillas antideslizantes. Estas plantillas están hechas a base de gel y consiguen dos cosas: por un lado, que el pie no se deslice dentro del zapato; y por otro, actúan como amortiguador de pisadas. Las de media suela son perfectas para zapatos de tacón.
- Crema hidratante. Si el zapato te hace rozaduras, embadurna todo el interior con crema hidratante. Incide en las zonas más conflictivas y moldéalas con las manos. De esta manera darás elasticidad evitando que el material te cause heridas.
- Productos antifricción. Existen parches y sprays antifricción que, aplicados antes de ponerse los zapatos, previenen la aparición de rozaduras. Además, no se ven, ya que son como una segunda piel que a los ojos resulta invisible.
- Bolsas congeladas. Llena dos bolsas pequeñas con agua, ciérralas bien y ponlas dentro de los zapatos que te causen molestias. Guárdalo todo en una bolsa más grande y déjalo en el congelador. Las frías temperaturas harán que el agua se solidifique, aumente de tamaño y presione los zapatos para que cedan.
- Elige plataformas. Si te apasionan los zapatos de vértigo, de esos con tacones infinitos, quizá deberías barajar la posibilidad de elegir los que tienen plataforma. Con ellos conseguirás la altura deseada, pero la plataforma te permitirá aguantar más con ellos, ya que el pie no tendrá que estar tan vertical.
- Unir los dedos. Un remedio tan eficaz como esperpéntico es el de unir con esparadrapo el tercer y el cuarto dedo del pie antes de ponerse los zapatos de tacón. Entre estos dos dedos hay un nervio que se bifurca en dos, pero al unirlos de forma artificial conseguimos liberar la presión sobre dicho nervio.
- Que el ritmo no pare. Cuando lleves zapatos de tacón, es preferible mover las piernas a quedarse quieta en un mismo punto. El movimiento hace que el peso del cuerpo se reparta mejor.
- No te descalces hasta llegar a casa. Uno de los motivos de que los pies duelan es que estos se hinchan. Si te los quitas antes de tiempo, cuando quieras volver a ponértelos te dolerán aún más.
- Visita a tu podólogo. Muchos de los dolores tienen su origen en dolencias específicas de los pies, por lo que la visita al podólogo es recomendable. Con el Seguro de MAPFRE Salud dispones de un amplio cuadro médico para elegir entre los mejores profesionales.
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