Si estás pensando en vender, comprar o alquilar una finca, parcela o cualquier tipo de terreno, es muy posible que necesites realizar una medición para determinar con mayor exactitud sus dimensiones. Por lo tanto, es muy importante conocer muy bien cómo medir una finca, el procedimiento a seguir y qué costes aproximados puede conllevar.
En qué consiste la medición de una finca
Medir una finca consiste en determinar con precisión los límites y dimensiones de un terreno. Este proceso es esencial para establecer la superficie real de la propiedad, su forma y su posición geográfica en relación con sus terrenos colindantes.
Aunque parezca una tarea relativamente sencilla, resulta complicado realizarla con exactitud con nuestros propios medios, ya que, aunque nos ayudemos de cintas métricas o cualquier tipo de aparato para medir los niveles, nunca conseguiremos la precisión necesaria.
Por lo general, los planos que ofrece la Sede Electrónica del Catastro no tienen por qué ajustarse a la realidad y suelen existir ciertas discrepancias entre propietarios por los límites de sus parcelas. De igual forma, es posible que las descripciones de las fincas que aparecen en las escrituras sean excesivamente vagas o antiguas.
Cuándo es necesario medir una finca catastral
Es posible que ya cuentes con algún plano que refleje las medidas del terreno, pero siempre es recomendable comprobar la realidad física del cuerpo cierto.
Existen múltiples ocasiones en las que se vuelve fundamental conocer cuáles son las medidas reales de alguna finca, como la delimitación de la propiedad, la planificación urbana, la valoración de la propiedad mediante una tasación o incluso la elaboración de planos y cartografías de la zona en cuestión. Por no hablar de los requisitos que suelen imponer los registros de la propiedad para realizar cualquier tipo de movimiento como la compra-venta o los cambios de titularidad.
Cómo llevar a cabo la medición de una finca catastral
En primer lugar, es importante definir con claridad cuál es la finalidad de la medición, para conseguir establecer los criterios de exactitud y tolerancias que pueden llegar a ser asumibles en la medición.
A continuación, lo más habitual es contar con los servicios de un topógrafo para que realice un levantamiento topográfico del terreno para obtener un plano detallado y preciso. Para ello, se requiere de la ayuda de medidores láser y GPS que consigan establecer diferentes puntos a diferentes alturas para que, acto seguido puedan unirse esbozando los principales puntos de referencia en la medición.
Si es necesario referenciar algunos elementos reseñables como podrían ser la ubicación de algunos muros, árboles o postes eléctricos, deberíamos solicitarlo por adelantado y siempre realizar un buen reportaje fotográfico para identificarlos con facilidad.
Una vez completada la medición, se elabora un plano con la información obtenida, que incluirá la superficie total de la finca en metros cuadrados, la forma y la ubicación de sus límites.
Por último, si fuese necesario registrar la propiedad en la Sede del Catastro, tendremos que seguir el procedimiento que aparece en su web para ir colocando las coordenadas GML en su posición definitiva, estableciendo así una nueva actualización del plano catastral general.
¿Cuánto cuesta medir una finca?
Los costes de una medición pueden variar dependiendo de varios factores, como la ubicación de la propiedad y la facilidad para llegar a ella, el tamaño de la finca, la complejidad del terreno y por supuesto, el profesional contratado para realizar el servicio.
En general, el precio de una medición puede oscilar entre varios cientos de euros o incluso llegar a los mil euros o más si el nivel de precisión y detalle solicitado es relativamente alto.
Igualmente, siempre es recomendable solicitar varios presupuestos a diferentes empresas o profesionales para poder comparar y tomar una decisión asegurándose que el precio está en órbita con el mercado de tu zona.
Las mediciones de fincas son procesos relativamente sencillos en los que no suelen producirse tantos incidentes como pueden ocurrir en tu vivienda, por ello, siempre es recomendable contar con un Seguro de Hogar MAPFRE en casa para una mayor tranquilidad frente a cualquier circunstancia propia del transcurso normal de la vida en el hogar.