Plazos para reclamar obras mal ejecutadas
Arquitecto, apasionado del diseño. Desarrolla su actividad profesional a través de su estudio med.arquitectos, del que es cofundador y arquitecto de proyectos. Compagina su actividad principal trabajando como escritor para el periódico Diario de Almería en la columna semanal "La Cuarta Pared", a la vez que colabora con MAPFRE redactando artículos técnicos, constructivos y de diseño.
Desgraciadamente, en el ámbito de la construcción en España, puede llegar a ser habitual encontrarnos con casos donde el cliente no termina de quedar satisfecho con el trabajo de la constructora por diversos factores, por lo tanto, es fundamental entender los plazos establecidos para presentar alguna reclamación por obras mal ejecutadas.
¿Cuándo y cómo puedes proteger tu inversión ante proyectos deficientes o inacabados? En esta guía exploraremos la legislación española, los plazos para reclamar y los pasos a seguir en caso de tener que enfrentarse a una obra mal ejecutada.
Entendiendo el plazo para reclamar obras mal ejecutadas
En el contexto legal español, el plazo para reclamar obras mal ejecutadas viene regido por el Código Civil. En términos generales, los propietarios suelen tener un periodo de 5 años desde la finalización de la obra para presentar reclamaciones.
Eso sí, este plazo puede variar considerablemente en función de la naturaleza de los defectos encontrados y de la tipología de la obra.
- Si se trata de defectos de la estructura, el plazo se amplía hasta los 10 años.
- Para los defectos en la instalación eléctrica, el plazo se reduce hasta los 3 años.
- Y si se trata de desperfectos en los acabados, el plazo se ajusta a 1 año.
En todo caso, para cualquier obra de planta nueva o reforma de cierta entidad, se suele retener el pago del entorno del 5% del valor total de la obra durante al menos un año para cubrir las posibles imperfecciones derivadas de la obra y que puedan surgir en los meses posteriores a la finalización de la obra. Tras transcurrir este periodo, el cliente debe abonar este 5% restante al constructor si no ha sucedido ningún imprevisto.
Daños y perjuicios por obras mal ejecutadas
Presentar una demanda por obra no terminada o mal ejecutada puede resultar en compensaciones por daños y perjuicios. La legislación contempla estas indemnizaciones que pueden incluir los costes directos de las reparaciones, así como las pérdidas económicas derivadas de la inhabilitación del uso de la propiedad. Es importante saber que es totalmente esencial contar con documentación detallada para respaldar cualquier reclamación.
¿Puedo negarme a pagar una obra mal ejecutada?
En virtud de la legislación española, el propietario tiene el derecho de negarse a pagar una obra mal ejecutada si no cumple con los estándares previamente acordados en el contrato y presupuesto. Por este motivo, es de vital importancia redactar un contrato antes de comenzar las obras en el que se detallen los trabajos a realizar, el plazo, las calidades constructivas demandadas y los plazos e importes de pago.
Sin embargo, si pensamos en negarnos a pagar una obra que no cumple con las expectativas, es crucial seguir los procedimientos adecuados notificando formalmente los problemas y documentar detalladamente los defectos antes de retener el pago.
Pasos a seguir para presentar una demanda por obra mal ejecutada
Documentación detallada
Documenta meticulosamente los problemas encontrados en la obra, respaldando cada circunstancia con fotografías, informes de expertos (como podría ser un arquitecto perito) y cualquier correspondencia relevante con el constructor que revele el mal hacer del mismo.
También es importante identificar en el contrato previo a la obra, los estándares de calidad que no hayan sido cubiertos en la ejecución.
Asesoramiento legal especializado
Busca asesoría de un abogado especializado en el sector de la construcción. Ellos son los más indicados para proporcionarte la orientación sobre los plazos específicos para tu caso en concreto, así como los requisitos legales.
Notificación formal al contratista
Antes de presentar una demanda, notifica formalmente al contratista sobre los problemas identificados, ofreciéndoles la oportunidad de abordarlos de manera amistosa sin tener que recurrir a la vía judicial. Esta notificación puede ser directamente un burofax.
Mediación y arbitraje
Considera la mediación como posible alternativa para resolver las disputas de una manera más rápida y menos costosa antes de recurrir a una demanda formal. Intenta comunicarte y llegar a acuerdos con el contratista que puedan llegar a ser beneficiosa para ambas partes.
Modelo de demanda
Si no has conseguido ninguna solución previa, utiliza un modelo de demanda específico para la legislación que le sea de aplicación, asegurándote de incluir todos los detalles y pruebas documentadas necesarias.
Presentación de la demanda
Deposita la demanda en el juzgado competente, siguiendo los procedimientos establecidos por el sistema judicial español. Asegúrate de estar siempre dentro de los plazos establecidos para evitar posibles problemas procesales.
Participación activa en el proceso legal
Por último, una vez presentada la demanda, responde a cualquier requerimiento del tribunal y colabora estrechamente con tu abogado para garantizar que todos los aspectos de tu reclamación estén debidamente presentados.
Si la sentencia no es satisfactoria, revisa las posibles vías de apelación o recursos legales adicionales. Tu abogado será clave en este proceso para determinar la viabilidad y los pasos a seguir.
Para evitar futuros inconvenientes, considera la opción de contratar un Seguro de Hogar MAPFRE. Este paso productivo puede proporcionar cierta tranquilidad financiera en caso de obras mal ejecutadas y otros imprevistos en tu propiedad.
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