Aprende a cambiar el cierre de una ventana corredera
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El mecanismo de cierre de una ventana corredera es bastante sencillo y cuando dejan de cerrar bien suele ser por el cierre o pestillo que engancha la ventana corredera con el agujero del marco. La buena noticia es que puede repararse en la mayor parte de las ocasiones, por lo que no es necesario cambiar toda la ventana.
La reparación de una ventana corredera en 3 pasos
Basta un poco de maña puede que tú mismo puedas repararlo y ahorrarte aún más dinero. Esos son los tres pasos para conseguirlo:
- Descubrir el problema. En primer lugar, observa el pestillo, puede que directamente ya veas que no está en su sitio. Por el uso o un cierre brusco, el pestillo se han podido descentrar o descolgar ligeramente lo que impide que ajuste correctamente en el agujero del marco de la puerta. Otras opciones es que el pestillo se haya dañado, presente alguna rotura o desgaste exagerado que el impida encajar.
- Repararlo. Si el problema es el pestillo, vas a necesitar una llave tipo Allen y/o un destornillador para poder extraer el mecanismo de la ventana y volver a colocar el pestillo en su sitio. Después, debes encajarlo correctamente en el sistema para que vuelva a funcionar. Si no estás muy seguro, primero intenta ajustar el pestillo tal y como está colocado dentro del marco de la ventana.
- Cambiar el mecanismo. Para sacarlo, primero libera la presión sobre el pestillo, quita el posible embellecedor que suele tener el mecanismo sobre el marco de la ventana y mueve el pestillo, si es posible volver a encajarlo es posible que ese fuera el problema. Si el pestillo se ha roto o dañado permanentemente tendrás que terminar sustituyéndolo por uno nuevo.
Reparar el pestillo de una ventana corredera no es complicado. Lo mejor es que no dejes este tipo de inconvenientes mucho tiempo sin solucionar; en el caso del pestillo, puede que si lo revisas en cuanto lo notas, solo sea ajustar, pero si lo dejas pasar, es probable que el pestillo se dañe de forma irremediable.
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