Arce japonés, un toque oriental para tu jardín
Avada
El equipo de redacción de MAPFRE lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras. No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
El arce japonés, además de ser una perfecta opción para plantar en tu jardín, según los cuidados que le des, puedes conseguir un arbusto o un pequeño arbolito. Por ello, además de por la variante que escojas, es una planta con muchas posibilidades.
¿En qué se caracteriza el arce japonés?
Esta tipología de árbol pertenece a la categoría de los caducifolios. Es una planta algo frágil y puede llegar a crecer hasta los 10 metros de altura, aunque el tamaño medio que suele alcanzar son 6 metros.
Gracias a las innumerables ramas que salen de su tronco, adquiere una forma de seta con una gran frondosidad.
Sus hojas son grandes con forma de palmera y pueden ser más o menos gruesas según el tipo que selecciones, e incluso puede llegar a medir unos 12 cm. Los colores también pueden variar del verde al rojo en función de la especie.
Si quieres conseguir un toque oriental para tu jardín, no lo dudes y planta un arce japonés, pero antes infórmate de las diferentes variantes:
– Osakazuki: es el más común, tiene hojas con 7 lóbulos, verdes en verano y rojas en otoño.
– Disectum: sus hojas son siempre verdes y hendidas o lobuladas.
– Aureum: cuyas hojas son de un color amarillo claro en primavera y de un dorado intenso en otoño.
– Bloodgood: con hojas de color rojo intenso en primavera y púrpura en otoño.
– Atropurpureum: tiene un rojo púrpura durante todo el año.
– Disectum atropurpureum: ésta es una variante rara ya que su color es de un rojo muy oscuro y la forma de sus hojas es hendida.
¿Qué cuidados necesita?
Dado que este árbol es bastante delicado, deberás tener unos cuidados especiales con él, entre los que destacan:
1. Es preferible plantarlo en zonas frías, aunque tampoco gélidas. El arce japonés tolera mucho mejor el frío que el calor.
2. El lugar adecuado debe estar resguardado del viento y de los rayos del sol directos.
3. Necesita un sustrato muy rico, por lo que la tierra siempre tiene que estar húmeda y debe abonarse dos veces al año, con abono orgánico si es posible.
4. Hay que usar un buen fungicida para combatir los hongos y los pulgones, aunque en general son bastante resistentes a las enfermedades.
5. Se debe podar en otoño. La forma más recomendada es desde la base hacia fuera, limpiando las pequeñas ramas que crecen por el tronco.
6. En otoño también se deberá plantar o sembrar, aprovechando la frescura del suelo y los rayos del sol más tenues.
7. En los meses de heladas, hay que tapar el suelo alrededor del árbol con corteza o corcho para evitar que se congele.
Si ya te has decidido a plantar un arce japonés para dar un toque oriental a tu jardín, toma nota de todos estos consejos para que crezca sano y fuerte. Del mismo modo que sigues algunos trucos en tu jardín, tu casa también se merece algunas reparaciones y reformas. ¡Infórmate de las que te ofrece el Seguro de Hogar Platino MAPFRE!
LO QUE DEBES SABER… |
|
Comentarios (0)