Las plantas artificiales son la solución perfecta para aquellos que quieren crear una atmósfera natural en su hogar, pero por el motivo que sea no pueden hacerlo. Si las plantas no son tu fuerte o, simplemente, no quieres renunciar a dar un toque de frescura y color a tu casa, ésta es una opción que debes tener muy en cuenta.
En la decoración, como en nuestra vida, perseguimos la búsqueda de lo natural, materiales que evoquen la naturaleza, crear ambientes acogedores…y una forma de conseguirlo es añadiendo vegetación. Además de las plantas vivas, que aportan frescura y autenticidad, existen infinidad de modelos de gran calidad de plantas artificiales que conseguirán dar a nuestros espacios ese toque de estilo y buen gusto.
Plantas artificiales, soluciones prácticas
Son muchos los motivos para decantarnos por las flores artificiales. En primer lugar, diremos que apenas necesitan mantenimiento. Olvídate de tener que dejar las llaves al vecino para que pase a regar las plantas. Preocúpate únicamente de mantener el polvo a raya y tener agua y jabón a mano para limpiarlas de vez en cuando. En la decoración del hogar tienen mucho que ofrecer, al igual que el Seguro de Hogar MAPRE.
¿Tu hogar no cuenta con la luz necesaria? ¿Pusiste aquella flor cerca del radiador y a los pocos días estaba marchita? A partir de ahora, no tendrás que volverte loco buscando el sitio perfecto, la iluminación adecuada… ¡Puedes colocar tus plantas artificiales donde más te apetezca sin pensar en la fecha de caducidad o de si son de exterior o interior!
La oferta es lo suficientemente amplia como para satisfacer todos los gustos y todos los bolsillos. Desde plantas con flores como hortensias, pasando por árboles y arbustos artificiales, hasta ramas de bambú para los más minimalistas.
Antiguas creencias
En la actualidad, los modelos han mejorado muchísimo y en algunos casos cuesta distinguir la real de la artificial. Casi cualquier especie posee su homónima artificial, siendo réplicas casi perfectas (siempre y cuando escojamos plantas de calidad).
Si, además, tenemos en cuenta que su precio es bastante más asequible, no seremos tan reacios a ponerlas en casa.
A pesar de sus ventajas cuentan con un gran número de detractores. Los hay que creen que el término planta artificial es sinónimo de ‘pasado de moda’, ‘hortera’ o, incluso, ‘cutre’. No es de extrañar si echamos la vista atrás y recordamos aquellas salas de espera de la consulta del médico llenas de jarrones con flores de plástico poco, o nada, estéticos.
Uno de los mayores inconvenientes de estas flores es que carecen de aroma y, obviamente, nunca podrán compararse a las naturales, que desprenden un perfume natural difícil de superar. Para compensar este defecto, diremos que no tendremos que sufrir las odiosas plagas de insectos ni las temidas alergias. Un problema menos para todos aquellos que viven pegados a un pañuelo en primavera.
Cómo utilizar plantas artificiales
Decorar con plantas artificiales puede ser de lo más entretenido: puedes cubrir una pared entera con ellas simulando un jardín interior, hacer guirnaldas para decorar paredes, utilizarlas en tus fiestas, decorar tu terraza, hacer arreglos florales para la mesa del comedor, colgarlas del techo o dar un aire renovado a tu cocina donde puedes jugar con diferentes composiciones. Una práctica que triunfa mucho es sumergirlas en frascos con agua. ¡Atrévete con todo!
Deja que la naturaleza se abra paso y llena de verde todos y cada uno de los rincones de la casa. Naturales o artificiales, llenarán tus espacios de vitalidad, optimismo y color.
