¿Los gatos pueden comer pienso de perro?
Licenciada en Veterinaria por la Universidad Alfonso X El Sabio desde 2009 y especializada en pequeños animales, perros, gatos y roedores.
Cuenta con su propia clínica veterinaria, donde dan servicio de consulta, pruebas de laboratorio y diagnóstico, hospitalización y cirugía.
Desde que adquirimos una mascota, la recomendación de nuestro veterinario siempre suele ser la misma en cuanto a alimentación se refiere,1 acostumbrarle a comer siempre pienso, ya que se trata de una comida mucho más completa, enriquecida, equilibrada, variada y adaptada a nuestro animal de compañía.
Eso es algo que la mayoría de propietarios tiene claro, lo que no está tan claro es cuando hay más de una mascota en casa. En ese momento, nos surgen preguntas acerca de si ambos animales pueden comer el mismo pienso o lo recomendable es que cada uno tenga el suyo propio.
La respuesta es que dos animales diferentes deben comer piensos diferentes y adaptados a sus necesidades nutricionales. En el caso de un perro y un gato, por ejemplo, el pienso del felino tiene más grasas que las del can. Esto se debe a que el organismo de uno y otro, funcionan de manera diferente. Además, cada uno suele ingerir cantidades diferentes.
Necesidades nutricionales distintas
Para entender por qué no debemos dejar que nuestro gato coma de manera rutinaria la comida del perro, antes tenemos que saber que las necesidades nutricionales de un gato no son las mismas que las de un perro.
Necesidades alimenticias de los gatos
Los felinos no son capaces de sintetizar una enzima llamada taurina a través del hígado, por lo que los piensos y preparados compuestos para ellos la llevan en la dieta.
Si un gato toma de manera continua pienso de perro, le estaríamos alimentando con déficit de taurina, y esto puede provocar un mal pelaje e incluso, déficit en la visión.
Esto no quiere decir que, si lo come un día, le pueda pasar algo, pero hay que evitar que lo haga de manera continuada en el tiempo para remediar problemas.
Además, en la dieta de los gatos se necesita un mayor aporte proteico que en la del perro, por eso, en el pienso de los felinos se suelen incluir proteínas a base de pescado, que además de ser necesario, darán un sabor más apetecible al alimento.
Necesidades alimenticias de los perros
En el caso de los canes, éstos necesitan una mayor cantidad de hidratos de carbono que los gatos. Para ofrecerles este aporte, se incluye más verdura en su alimentación, algo que, si el gato ingiere de manera continua, puede dar lugar a un aumento de peso.
¿Cómo evitar que un perro y un gato que conviven compartan el mismo pienso?
Hacer que ambos animales entiendan cuál es su pienso y que no coman el de su compañero peludo no siempre es una tarea sencilla, pero existen algunos trucos para tratar de conseguirlo.
Como casi todo, la manera de alimentar a nuestros animales se convierte en un hábito o una rutina en cuanto al lugar, los horarios, la cantidad, etc. En ese sentido, el primer paso es ponerle a cada uno su bol de pienso en un sitio diferenciado.
¿Cómo evitar que un perro no se coma el pienso del gato?
Si convivimos con un perro y un gato y estos tienden a mezclar platos, la mejor opción es poner el pienso del felino en un lugar alto, de este modo, evitaremos que el can pueda acceder a él. Lo complicado está en cómo hacerlo al revés.
¿Cómo puedo evitar que mi gato ingiera la comida del perro?
Todo depende de la frecuencia con que le suministremos la comida a nuestro perro. Por un lado, están los que tienen la comida siempre puesta, ad libitum, por lo que será más complicado, ya que el gato siempre tendrá acceso al pienso que no es suyo.
Por otro lado, están los que comen la comida a una hora concreta y la terminan, en ese caso, los gatos sólo tendrán acceso si sobra algo que, en la mayoría de los casos, será cero.
Este último caso, es el más recomendable de cara a evitar que el gato coma comida de perro. Además, podemos utilizar algunos trucos:
- Dar de comer a ambos a la vez, cada uno en su sitio e intentar que sea siempre a la misma hora. De esta manera, cada uno estará “a lo suyo” y no tendrá la tentación de coger lo del otro.
- Poner el bol de la comida un tiempo concreto, por ejemplo, 15 minutos, y si en ese tiempo no se lo han comido, retirar el pienso para evitar que uno se coma lo del otro.
En cualquier caso, si tienes dudas acerca de qué alimentación es la más recomendable para tu mascota o cómo hacer para que no coma cosas que no debe, recuerda que MAPFRE cuenta con un Seguro para Mascotas con una amplia red de centros veterinarios donde podrán ayudarte.
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