Las mejores razas de gatos para niños
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Los gatos tienen fama de no ser tan sociables como los perros (por norma general) pero lo cierto es que sí son animales cariñosos, que disfrutan y buscan el contacto humano y que necesitan de nuestros cuidados y protección. Como en todos los animales hay excepciones, pero la educación de animal es clave, así como la manera de tratarlo. Además, a la hora de elegir un felino con el que compartir nuestra vida, debemos tener en cuenta que existen algunas razas de gato mucho más dóciles y cuya convivencia con los niños puede ser perfecta.
¿Qué beneficios tiene crecer con un gato en casa?
Los animales aportan múltiples beneficios a los niños (y no tan niños) en su día a día, y como decimos, los gatos no son una excepción. Éstas son las más reseñables:
Responsabilidad
Tener un gato en casa puede enseñar a los niños sobre la importancia de cuidar a otro ser vivo, lo que les ayuda a desarrollar habilidades de responsabilidad y empatía.
Reducción del estrés
Se ha demostrado que la presencia de mascotas como los gatos, puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad en los más pequeños, promoviendo un ambiente tranquilo y relajado en el hogar.
Compañerismo
Los gatos son compañeros cariñosos y afectuosos que pueden brindar compañía y apoyo emocional a los menores, especialmente si son hijos únicos o tienen dificultades para hacer amigos.
Estimulación sensorial
Los gatos son criaturas juguetonas que pueden proporcionar estimulación sensorial a través del juego, lo que ayuda a mejorar la coordinación motora y habilidades cognitivas.
Mejora de la autoestima
El cuidado de un gato y la relación afectuosa que se establece con él pueden ayudar a los niños a desarrollar una mayor autoestima y confianza en sí mismos.
¿Cuáles son las razas de gato que mejor conviven con niños?
De angora turco
Esta raza se caracteriza por ser muy devota de su dueño y le suele seguir por toda la casa. Es dócil y cariñoso con su familia y también juguetón, por lo que hay que dedicarle unos ratitos al día para interactuar con él. Puede adaptarse bien a cualquier entorno y es muy inteligente, curioso, ágil, muy fiel y mimoso con sus propietarios.
Persa
Es una raza de gato cariñoso, dócil y tan casero que hasta puede parecer un perro. Es tranquilo y disfruta de la compañía de la familia con la que vive.
Siamés
Su personalidad suele ser abierta, extrovertida y algunas veces algo ruidosa. Los siameses piden atención y necesitan sentirse parte de la familia. Es un gato perfecto para familias con niños, pueden vivir en pisos pequeños y quieren a las personas, tanto que estarán esperando que su familia vuelva a casa para estar cerca de ellos.
Birmano
Son muy afectuosos y cariñosos, gracias a haber sido criados como gatos de compañía durante muchas generaciones. Son dóciles, maúllan con suavidad y además son sociables, listos y amistosos. También son curiosos y les gusta la compañía
Ragdoll
El gato ragdoll (muñeca de trapo) debe su nombre a la relajación muscular que adquiere cuando le coges en brazos, lo que les hace muy deseables para los niños. Se caracteriza por su carácter tranquilo, casero y cariñoso, por lo que es ideal para casas con peques.
Maine coon
Son tan sociables que uno de sus destinos ideales son las casas con niños o con otras mascotas. Teniendo en cuenta que necesitan poder tener su espacio privado para sus momentos de intimidad, estos gatos disfrutan muchísimo acompañando y jugando con los niños, sea la hora que sea.
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