5 juegos de estimulación del olfato para perros
Licenciada en Veterinaria por la Universidad Alfonso X El Sabio desde 2009 y especializada en pequeños animales, perros, gatos y roedores.
Cuenta con su propia clínica veterinaria, donde dan servicio de consulta, pruebas de laboratorio y diagnóstico, hospitalización y cirugía.
¿Cómo puedo estimular el olfato de mi perro?
Lo primero que debemos saber es que los perros se guían por el olfato más que por cualquier otro sentido.
Si nos fijamos en el paseo, la mayoría van olfateando. Por eso, podemos ayudarles a estimular este sentido que ya de por si está bastante desarrollado.
Existen una serie de productos estrella para este estímulo:
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Juguetes, pelotas o cualquier artículo que suponga un juego entre nosotros y nuestra mascota le hará que se incite y quiera participar en la búsqueda del mismo.
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Premios: pueden ser snacks, trocitos de pavo, galletas de perro etc. son otro estímulo, ya que saben que además de jugar, reciben una recompensa.
Juegos para desarrollar el olfato de tu perro
Hablaremos de 5 posibles juegos para animar a que a nuestro perro le guste olfatear más de lo normal. En muchos casos, pueden ser actividades de nuestro día a día que con un poco más de ingenio, podemos convertir en una buena práctica para nuestro peludo.
Escondite de juguetes
Un perro juguetón, tiene “obsesión” por sus juguetes. Una buena manera de estimular que olfatee puede ser enseñarle su juguete, escondérselo, y empezar el juego con palabras clave como “busca la pelota”, por ejemplo.
Lo ideal es empezar en espacios cerrados para que no se disperse mucho, pudiendo más tarde hacerlo en lugares más abiertos y esconder estos juguetes, premiando con palabras o premios cuando los encuentre. Se habla de un refuerzo positivo.
Búsqueda de premios
A la hora de dar premios, podemos cerrar los puños y que “adivine” mediante el olfato en qué mano se encuentra. Para ello, necesitamos que los premios tengan un olor identificable y, si es posible, que sean blandos, para que puedan encontrarlo más fácilmente y poco a poco ir complicando esta actividad.
Complicar la búsqueda
Una vez que ya localicen los premios y reconozcan fácilmente el olor, podemos esconderlos en lugares más complicados, por ejemplo, escondiéndolos en mantas, toallas e incluso en un bolsillo.
Juguetes interactivos
En ellos se pueden esconder premio para que ejerciten una vez más el olfato, para conseguirlos, tendrán que moverlos, golpear el juguete con la pata o lanzarlo por los aires, por lo que además de conseguir una recompensa mientras utilizan su nariz, hacen ejercicio.
Existen algunos modelos como los Kong, que presentan orificios donde puede meterse comida húmeda, por ejemplo, y congelarla; en los meses de verano a parte de entretenerles mucho, les ayudará a que olfatee para encontrar la recompensa dentro del juguete.
Jugar con nosotros
Nada resulta más estimulante para nuestra mascota que jugar con nosotros. Eso les motivará a buscar un juguete, una recompensa o lo que sea, con tal de que sigamos un buen rato dedicándoles nuestro tiempo. Esto además de una diversión y un entrenamiento, estrecha el vínculo entre nosotros y nuestra mascota.
No todos los perros son iguales ni reaccionan igual. Es importante saber que cada raza tiene sus habilidades y sus limitaciones, y no conviene forzarles. Nuestro veterinario podrá ayudarnos a identificar a nuestra mascota según sus características para que tengamos en cuenta que juegos son los mejor indicados.
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