Lebrel o galgo afgano: ¿es tu perro ideal?
El equipo de redacción de MAPFRE lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras.
No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
El pelaje largo y fino es la principal seña de identidad del lebrel o galgo afgano. Es un perro doméstico, aunque tiene un origen cazador del que mantiene un carácter de libertad que, aunque con adiestramiento y vigilancia, se convierten en perfectas mascotas domésticas.
Características físicas del lebrel
Tamaño: medio
Peso: entre los 22 y los 27 kilogramos.
Altura: ronda los 65 centímetros
Pelo: largo y sedoso, necesita muchos cuidados y constantes.
Color: hay una gran variedad de colores que van desde los casi negros hasta los blancos, pasando por los tostados. Presentan mezclas, pero nunca motas o manchas.
Características: se caracteriza por su actitud altiva y elegante, extremadamente llamativo por su recubrimiento de pelo largo, tienen largas orejas y una cola elevada que termina en forma de anillo.
Lo más recomendable es que si este perro te interesa como mascota, busques adoptarlo. Si decides comprarlo, debes tener especial atención al origen. El precio puede variar mucho en función de su edad, raza, origen… pero es posible que ronde los 300 euros.
Origen e historia de los afganos
La historia de los afganos, como indica su nombre, se ubica en Afganistán, Pakistán y norte de la India. Parece que fueron pueblos nómadas los que empezaron a criar esta raza de canes. Gran parte de su historia y evolución no se conoce, pero se supone que se adaptaron para sobrevivir, convirtiéndose en perros cazadores en las montañas.
El lebrel afgano es hoy aún un perro habilidoso, extremadamente activo y con necesidad de libertad, lo que recuerda sus raíces cuando cazaba presas pequeñas.
La emigración hacia occidente de los lebreles se le debe a los soldados británicos que los trajeron a Inglaterra en el siglo XIX. El American Kennel Club (AKC) reconoció al afgano en 1926. En los años 70, esta raza se puso muy de moda y vivió una etapa de máximo reconocimiento y fama.
Hoy el galgo afgano es un perro que no se usa para la caza, sino que se dedica más a la exhibición, desfiles y concursos por su belleza y porte distinguido. Como mascota, son habituales, aunque es importante antes de decidirse, asegurarse de que puedes darle lo que necesita para su perfecto desarrollo y calidad de vida.
Personalidad de los galgos afganos
No es un perro difícil de tratar por carácter. Es capaz de adaptarse a la vida como mascota, aunque no es un tipo de perro que se recomiende especialmente para hacer compañía a niños o ancianos.
Aunque no tienen contraindicaciones por su carácter, sí hay que recordar que el origen del lebrel es cazador, por lo que es un perro solitario en sus paseos y juegos que no es apto para caminar por ejemplo a tu lado, sin sujetar.
Con adiestramiento y paciencia, el afgano es capaz de obedecer órdenes, pero hay que tener en cuenta que es un animal testarudo, no reacciona bien ni con obediencia a los castigos duros severos, por el contrario, se vuelve más desobediente.
¿Es el afgano tu perro ideal?
El galgo afgano no es un perro para todos los públicos, pero no por su carácter, sino por las necesidades que tiene. Los expertos recomiendan informarse de forma pormenorizada antes de adoptar uno o varios de estos ejemplares.
Ten en cuenta tres necesidades básicas que todo lebrel debería tener cubiertas, al margen, de las habituales de todo perro o mascota que empiezan por la seguridad y protección más completa que puedas ofrecerles. Con el Seguro de Mascotas MAPFRE tienes la tranquilidad de estar cubierto ante cualquier percance relacionado con tu perro.
-
Paseos en libertad
No cuentes, en principio, con que tu galgo afgano pasee a tu lado y sin sujeción de forma ordenada y calmada. No es esa su naturaleza, igual ocurre si lo sacas a pasar por zonas abiertas o sin vallar. Lo ideal es poderle sacar a grandes extensiones de recreo, pero seguras y en casa, que cuente con un patio o jardín amplio, pero siempre cerrado para su seguridad. Un parque canino puede ser un recurso, al menos, en parte y para ratos.
-
Actividad diaria intensa
El lebrel necesita huir del aburrimiento, si no le das la cantidad de acción que necesita cada día, se incrementarán sus conductas menos domésticas y es fácil que mordisquee por ejemplo o se vuelva algo menos sociable.
Tienes que sacar al afgano si vive en una casa, al menos, dos o tres veces al día, como cualquier otro perro, pero se recomienda que recorra alrededor de dos kilómetros al día y que juegue el mayor tiempo posible de forma libre. Es cierto que no necesita sociabilizar, pero si espacio abierto donde correr.
-
Aseo y cuidado de su pelaje
El pelo largo y sedoso de este perro es uno de sus principales atractivos, pero también su principal desventaja si no puedes dedicarle el tiempo y cuidado que exige. Cuenta con que tu perro necesitará baños y cepillados semanales.
El afgano necesita eliminar el pelo muerto y evitar los enredos a los que su pelo es propenso. Los adultos machos cambian el pelaje en primavera y otoño; las hembras, si no están esterilizadas, mudan cada nueva estación.
Comentarios (0)